Para responder a los escándalos de abusos por parte de ejecutivos y estrellas, los Premios Emmy 2018 buscaron hacerse eco de la mejor forma que conoce Hollywood: con humor.
Un musical de los humoristas de Satuday Night Live, Kate McKinnon y Kenan Thompson ironizó sobre la falta de diversidad étnica y sexual en la industria, con chistes en la canción como "bienvenida la gente asiática, les dimos un show" o "¿hay lugar en esta canción para un tipo hetero y blanco como yo?”. John Legend, Kristen Bell, Sterling K. Brown y RuPaul participaron del show de apertura, pero fue Ricky Martin, nominado por El asesinato de Gianni Versace: American Crime Story, quien puso a bailar a todos en el escenario bromeando sobre el “sabor latino”.
Luego fue el turno de los anfitriones de la entrega Colin Jost y Michael Che, también parte de Satuday Night Live, para hacer un monólogo donde no faltaron las aluciones a la política de Estados Unidos, Donald Trump o incluso, la polémica que generó la cancelación de la serie de Roseanne Barr por un comentario racista y xenófobo en el que comparaba con un mono a la exconsejera de Barack Obama Valerie Jarrett. “Es un honor estar compartiendo esta noche con tantas figuras talentosas y creativas en Hollywood… a la que todavía no han atrapado”, lanzó uno de los animadores, provocando risas incómodas en la sala. “Este año la audiencia puede beber en sus asientos, espero que les emocione. Porque lo que más necesita Hollywood en este momento es gente perdiendo sus inhibiciones en su lugar de trabajo”, lo siguió el otro, cubriéndose de las críticas a la ceremonia.
¡Mirá el momento! El show de apertura y el monólogo de los Premios Emmy 2018.