En el primer festejo del Día del Padre de Diego Maradona (55) sin su papá (Don Diego murió el 25 de junio pasado), el astro siguió su corazón y regresó a la casa que habitaron sus padres hasta sus últimos días. El domingo comenzó tarde, cuando a las 14.45 hs. El Diez llegó al barrio de Villa Devoto para almorzar un asado junto a Rocío Oliva (25) y Jana Maradona (20).
De la comida también formaron parte hermanos, primos, cuñados y sobrinos del clan Maradona, además de Rocío y Jana. Una vez finalizado el almuerzo, Diego partió al encuentro de sus "nenas", Dalma (29) y Gianinna Maradona (27), quien a su vez estaba con Benjamín Agüero (7), según deslizó desde Twitter, para compartir una merienda. Cuando un seguidor le pidió que le muestre una bandera a Diego, ella respondió: "Ahí se la mostré junto a un corazón". De todas maneras, llamó la atención que ninguna de las hijas de Claudia Villafañe saludaran públicamente a Maradona por el Día del Padre a pesar de haber tenido actividad en las redes sociales.
Quienes no tuvieron la suerte de contar con el cariñoso saludo de Maradona fueron Diego Maradona Junior, el hijo extramatrimonial con quien jamás quiso tener relación y Dieguito Fernando. El lunes por la tarde en Intrusos, Marina Calabró hizo público un mensaje de voz en el que Ojeda aclaró que fue ella quien se negó a enviar a Dieguito a la casa de Devoto porque estaba "enfermo con el virus pie, boca, mano". Instantes más tarde, Calabró confirmó que los papás de Verónica llevaron al niño a la casa del papá en la propia tarde del lunes, ya más repuesto de su enfermedad.
A pesar de ello, el domingo Verónica Ojeda había dejado trascender su enojo a través de durísimos retweets y me gusta en la red social.