En tiempos de cambios en la comunicación, falta de diálogo y diversas grietas, Andy Kusnetzoff (48) propone por tercer año consecutivo PH, Podemos hablar, con todo lo que eso conlleva.
Desde el 9 de marzo, cada sábado a las 22 horas el conductor volverá a reunir a la mesa a seis invitados, generalmente con poco en común entre sí, para charlar sobre distintos tópicos, con debate y opiniones distintas. Y para el primer programa del año, recibirá en su PH de Telefe a Santiago Del Moro, Lizy Taglini, Marcelo Polino, Flor Vigna, Gimena Accardi y Titi Fernández.
A horas del debut, Andy charló con Ciudad sobre su presente laboral, la radio, su familia y mucho más.
-¿Cómo te encuentra esta tercera temporada de PH?
-Bien, entusiasmado. Arrancamos y veremos cuándo termina. Lo mío es a corto plazo. La primera temporada arrancamos por cuatro programas y después seguimos. Nunca se sabe. No me pongo a pensar a largo plazo. Es más mía de la cabeza, no es que no tenga contrato. Si un programa no va bien por más que tengas el contrato firmado, se termina. Así que todo es relativo.
"Seguramente desde mitad de año invitaremos a políticos, por las elecciones. No sé cómo los voy a integrar. A mí me encanta el enfrentamiento, pero capaz meto un político de cada sector por programa. Ellos no quieren juntarse. Suena muy bien el diálogo y todo, pero en la práctica no acceden".
-¿Cómo influirá la política en PH en un año de elecciones presidenciales?
-Calculo que después de mitad de año voy a volver a invitar a políticos. Es un programa dinámico y nunca sabés lo que va a ir pasando, pero ese es el plan.
-¿Cómo vas a hacer para que no te afecte la famosa "grieta" a la hora de juntar a políticos de distintos espacios?
-No sé cómo los voy a integrar, la verdad. A mí me encanta el enfrentamiento, pero capaz meto un político de cada sector por programa.
-¿Ellos no quieren juntarse?
-Claro. Ellos no quieren. Suena muy bien el diálogo y todo, pero en la práctica no quieren juntarse.
-¿Cómo tomás cuando te pasa eso de que dos personas no quieren juntarse en tu programa? Por ejemplo, el año pasado te pasó que Calu Rivero se bajó porque no quería compartir la mesa con Fede Bal y El Polaco, quienes habían sido denunciados por sus exparejas por violencia de género, aunque la Justicia los había sobreseído a ambos.
-No fue así como se dijo todo lo que ocurrió, por ejemplo no fue verdad que la mamá de Calu llamó para decir que no iba. Sí sucedió que Calu estaba sensible con el tema y respeto su decisión. Después es muy personal, porque entra en juego qué pasa con cada uno. Fede Bal tiene su historia y lo que dice la Justicia. Es muy difícil para mí opinar, porque no me quiero poner ni en defensor ni en acusador. Obviamente hay personajes a los que directamente no invito. Son temas delicados. Se charla antes y también en este caso puntual lo charlé también después con Calu.
"El primer éxito personal es estar orgulloso de lo que hacés, porque te puede pasar que medís mucho pero no estás orgulloso. Y me ha pasado. He hecho programas en los que me vestía de una forma en la que no me sentía cómodo, no era yo".
-¿Entonces, hasta mitad de año va a ser más "farandulero"?
-No lo enfocaría en la farándula, sino en historias. Porque las historias pueden ser de un sobreviviente de la tragedia de los Andes, un deportista, depende. Me gusta que sea ecléctico.
-Hace poco Juana Viale, invitada a Perros de la Calle (programa que conducís hace 17 años por FM Metro), aprovechó para nuevamente traer a colación el tema del parecido de PH con el programa de Mirtha Legrand...
-Fue jugando, yo la provoqué.
-¿Quedó cerrado el tema entonces?
-Para mí sí, pero cada tanto vuelve a abrirse.
-Nacho Viale a veces también manda alguna indirecta, ¿tenés buena onda con él?
-Nos habíamos visto en algunos eventos en los que no nos habíamos saludado, pero hace poco nos vimos en uno de Boca que conduje y ahí sí nos saludamos, buena onda. Y con Juana tenemos buena onda, yo la “pinché” diciéndole que no había visto el programa de Mirtha Legrand de los sábados, es más un juego pícaro. Obviamente que no le respondí porque estaba en mi programa, era mi invitada. Me divirtió, no me molesta.
"No leo todos los comentarios de las redes, pero veo. Trato de leer también las críticas que generan cosas positivas, pero la verdad es que con el programa pasa mucho que en general son comentarios positivos".
-PH se convirtió en poco tiempo en un clásico de los sábados, ¿qué diferencias encontrás en hacer un éxito ahora o en los noventa, por ejemplo, cuando quizás los números del rating eran altísimos y la televisión era distinta?
-Ahora encuentro que el primer éxito personal es estar orgulloso de lo que hacés, porque te puede pasar que medís mucho pero no estás orgulloso. Y me ha pasado. He hecho programas en los que me vestía de una forma en la que no me sentía cómodo, no era yo. Pero también para saber quién es uno tiene que transitar por distintos lugares. Arranqué a los 21 años y no es que te pasa que tenés clarísimo lo que querés ser, vas transitando un camino, vas viendo. Ahora soy un tipo más grande y ya sé lo que quiero y lo que no y pude, dentro de esas exigencias, encontrar algo que a la gente le gusta. Entonces estoy más que feliz, es un privilegio.
-¿Cómo notás que al programa le va bien, más allá del rating?
-Es imposible que no te des cuenta, te lo comentan en las redes, lo ves, te das cuenta. Todos los programas tuvieron repercusión, en los principales diarios salen notas, en Ciudad también siempre hay algo de lo que pasó en el programa. Son todos indicadores.
-¿Creíste que en este momento tan difícil de la televisión ibas a volver a hacer un programa del que todos hablan?
-Me imaginaba que iba a hacer cuatro programas. Nos fue bien por suerte, pero yo voy tranquilo.
-¿Te afecta lo que te puedan decir en las redes?
-No leo todos los comentarios, pero veo. Trato de leer también las críticas que generan cosas positivas, pero la verdad es que con el programa pasa mucho que en general son comentarios positivos. No lo digo yo, pueden entrar a los posteos de los programas y verlo. Como PH no tiene redes, lo pongo yo en mi Instagram y leo todo yo. Leo una tendencia.
Sobre la salida de Cabito Massa Alcántara de Basta de todo, programa vecino de Metro, dijo: "Trato de no opinar porque es algo interno. Además, lo quiero al Cabo, lo quiero a Matías (Martin), es mi amigo. No estoy en el medio, pero tengo mi opinión. Trato de no meterme en temas que ellos ya hablaron y ya está, todo dicho".
-¿Y si hay malos comentarios?
-Lo que te afecta no es eso. A ver, es muy difícil que te afecte que te digan “esto es malísimo” si sabés que no lo es y, por el contrario, si sabés que lo que hacés no está bueno, que te lo halaguen. Lo que me afecta es cuando hacés cosas que no te representan. Y las redes lo reflejan, no son una isla. Sí es verdad que si hablás por ejemplo de política todo se vuelve más agresivo, sobre todo en Twitter. Pero si en Instagram ponés un posteo sobre algo del programa, refleja bastante lo que sucede.
-Cambiando de medio y pasando a la radio, a fines del año pasado ganaste el Martín Fierro de Oro. ¿Cómo te sentís con eso?
-Siento que tengo más pelo, que estoy más joven, ja, ja. Es un mimo. Ustedes que me acompañaron mucho desde Ciudad saben que 17 años son muchos en Perros de la Calle y es un reconocimiento al momento del programa, a la trayectoria y me gusta.
-Justamente Jorge Lanata usó la frase "le falta trayectoria" para criticar que te lo hayan dado. ¿Qué respondés a eso?
-Mirá, es un tema de él. Si le gusta o no le gusta a Lanata no va a cambiar nada. Los premios son debatibles. Por supuesto que este premio está relacionado con la trayectoria de Perros de la Calle, que si la comparamos con la de Héctor Larrea, nos tenemos que retirar todos. Si es por un tema de trayectoria, le deberíamos dar el Martín Fierro de Oro todos los años a Larrea. Yo también se lo daría. Pero creo que la idea es ir buscando otro tipo de trayectoria también y no sólo la de los indiscutidos históricos como Larrea o Lalo (Mir) y Bobby Flores, que fueron los pioneros. Hay otro tipo de cosas que tienen su trayectoria, que no es de 50 años. Yo no tengo 50 años y no se puede comparar. Creo que se trata de eso, así como también Luis Novaresio ganó su Martín Fierro. Por otra parte, no lo decido yo, solamente lo recibí, contento. Y además creo que Perros de la Calle está en un gran momento, tenemos un gran equipo, además de Gabriel Schultz, Cayetano y Harry (Salvarrey), está María O’Donnell, ahora entró Noelia Barral Grigera, que es buenísima, vuelve Alessandra Rampolla, sigue Vero Lozano, está Hernán Casciari, Eduardo Sacheri, Gastón Gaudio, hay un dream team y estoy feliz. Lo que opinen los demás me parece absolutamente opinable.
-En Metro hubo muchos cambios estos meses. ¿Cómo tomaste todo el "Cabito-gate"?
-Trato de no opinar porque es algo interno. Además, lo quiero al Cabo, lo quiero a Matías (Martin), es mi amigo. No estoy en el medio, pero tengo mi opinión. Trato de no meterme en temas que ellos ya hablaron y ya está, todo dicho.
-En Basta, además de los cambios de nombres, hubo cambios profundos a nivel editorial, no se hacen más ciertos chistes, se incorporaron otras temáticas y hasta se sumó por primera vez una mujer (Malena Guinzburg). ¿Creés que Perros vivió algo parecido? ¿Cómo se hace para que no quede forzada la incorporación de mujeres o de ciertos temas o secciones?
-Nosotros nos fuimos aggiornando, todo el tiempo. No solamente con respecto al feminismo, si te referís a eso, sino a todos los temas. Yo no soy el mismo que cuando empezamos. Con respecto a los cambios grandes en el programa, los empezamos hace dos años, cuando se sumaron mujeres a la mesa, pero es importante aclarar que en Perros... siempre hubo mujeres, porque las productoras históricamente siempre fueron mujeres, de hecho ahora cambió y entraron varones. Jimena (Blizniuk) y Flor (Suárez, su pareja y madre de su hija) manejan básicamente todo y lo que yo trato de hacer es traer gente interesante, no cumplir con un cupo femenino. Son todas mujeres brillantes y rápidas y eso es lo bueno. Por otro lado, no quiero hablar de Basta..., pero me encanta que esté Malena Guinzburg ahí, la veo en la transición y está bueno ir aggiornándose. A ella la quiero y esto va más allá de lo que pasó con Cabo.
¿Le gustaría tener otro hijo? "Ojalá. Me gustaría. Los dos tenemos hermanos y muy buena relación con ellos, así que seguramente sí".
-¿Y con respecto a tu familia, cómo transitás este momento en el que Helena (2 años y medio) ya está más grande?
-Estoy muy bien con la familia. ¡Mi hija ya aprendió a decir su apellido! Aunque todavía no a escribirlo por supuesto, ja. Estoy muy contento, empieza el jardín, estoy con reuniones de padres y muy feliz.
-¿Cómo ves a Flor mamá?
-Creo que es una mamá espectacular, nos divertimos mucho y a Helenita la integramos a nuestra vida, viaja con nosotros incluso cuando lo hacemos por trabajo y se lleva re bien con todos. Ya sabe el nombre de Harry, de Cayetano, de Gaby. Para ella, por ejemplo, Jimena no es Jimena sino “la mamá de Roma”.
-¿Te gustaría tener más hijos?
-Ojalá. Me gustaría. Los dos tenemos hermanos y muy buena relación con ellos, así que seguramente sí.