Los artistas, por definición, tienen una sensibilidad extrema. Ese profundo sentimiento, a veces desbordante, suele ser la clave de su éxito. En el caso de los cantautores, el momento de la inspiración es clave. Luego viene la composición, la interpretación y la vida propia que cobran las canciones.
Durante 2020, Abel Pintos (37) estuvo sumamente estimulado. No solo la pandemia lo sensibilizó al extremo sino que también junto a su compañera, Mora Calabrese, fueron padres de Agustín. Además, comparten la crianza de Guillermina (12), hija de su pareja. Toda esta revolución hizo que Abel compusiera nuevos temas y hasta le cambiara el nombre a su más reciente disco.
En una charla exclusiva con Ciudad, en el marco de Un sol para los chicos 2021, Pintos habló de cómo transita estas emociones.
"Fue muy duro transitar el 2020 como para todos. En lo personal, tuve el privilegio de vivirlo en un contexto amoroso y de mucho cuidado, pudiendo estar con mi familia, recibimos a nuestro hijo más chico y eso trajo mucha luz".
-¿Cómo te sentís formando parte de los 30 años de Un sol?
-Estoy viviendo con mucha alegría este nuevo encuentro solidario. En estos momentos esta ayuda se necesita especialmente y está llegando. También estoy muy contento por estar celebrando 30 años de una movida así en un tiempo donde recibimos malas noticias. Es una victoria y ayuda a salir con más vigor a la calle.
-¿Cómo viviste la cuarentena extrema y todo lo que significa esta pandemia?
-Fue muy duro transitarlo, como para todos. En lo personal, como dijiste, tuve el privilegio de vivirlo en un contexto amoroso y de mucho cuidado, pudiendo estar con mi familia. La luz que tiene la llegada de la vida, recibiendo a nuestro hijo más chico (N. de la R.: comparten la crianza de Guillermina, hija de Mora), fue hermoso. Pero luego también sufriendo lo que sufrimos todos desde las incertidumbres, desde ver lo mal que lo pasó mucha gente, pensando en el panorama que nos encontraremos después. Creo que las heridas son muchas y más profundas. Fue duro y sigue siendo duro. Al menos ahora podemos empezar a ver una luz y un poco más de claridad, ojalá que sea cada día más así y que pronto pueda ser una anécdota que no repitamos.
-¿Cómo te atravesó como artista todo lo que viviste?
-Estaba terminando de editar el disco que salió en mayo que se llama El amor en mi vida. Y justamente Piedra libre es una canción escrita un poco con el sentido de la llegada de Agustín a nuestras vidas pero también con todo lo que significaba el encierro y estar lejos de nuestros seres queridos. La propia canción que le da el título al disco (El amor en mi vida) también la compuse en cuarentena, es decir, que no solo ingresó sino que le cambió el nombre al proyecto. Pasaron muchas cosas a nivel creativo. Pero no veo la hora de volver a crear en un contexto más tranquilo, ja, ja.
-¿Cómo te preparás para los shows que vas a dar en el Movistar Arena en octubre?
-Me siento muy agradecido con el público. Lo digo cada día. Es muy conmovedor que sigan acompañando durante tantos años. Sabemos que en estos tiempos también es necesario verse a la cara, lo necesitamos como seres humanos. Me siento muy feliz de eso.
"Estoy profundamente emocionado y aprendiendo a diario con Agustín. Pero yo soy padre por partida doble porque con Guillermina, que es adolescente, todo el tiempo estoy revisándome a mí mismo sobre las cosas que quiero transferir. El tiempo y la vida van cambiando mucho y estoy todo el tiempo revisando cómo le hago llegar las cosas que le quiero hacer llegar".
-¿Van a estar presentes Mora, Guillermina y Agustín?
-Seguramente irán a algunas de las funciones. No creo que a todas, pero van a estar.
Abel con sus hijos Agustín y Mora. (Foto: Instagram)
-¿Qué significa Agustín en tu vida?
-Estoy profundamente emocionado y aprendiendo a diario. Alucinado también con lo que es descubrir a una criatura que crece día a día. Pero yo soy padre por partida doble (N. de la R.: en el último Día del Padre, Abel mostró un tatuaje con las inciales de Agustín y Guillermina en sus manos) porque con Guillermina, que es adolescente, todo el tiempo estoy revisándome a mí mismo sobre las cosas que quiero transferir como padre. El tiempo y la vida van cambiando mucho y estoy todo el tiempo revisando cómo le hago llegar las cosas que le quiero hacer llegar. Me encuentro cambiando y es lo que vivimos todos los que tenemos la posibilidad de ser padres en estos tiempos. Es muy estimulante y profundamente emotivo.