Hace cuatro meses, todo era felicidad. Carolina "Pampita" Ardohain estaba embarazada, transitando la última parte de la gestación de Beltrán. Faltaba poco para que naciera su tercer hijo, que -vaya vueltas del destino- luego cumpliría tres meses el día en que su hermanita mayor, Blanca, de seis años, falleció.
Hace cuatro meses, Pampita hablaba de Blanca: "Ella es mi compañera, somos muy unidas. A cualquier lado que voy viene feliz, me ha acompañado a producciones de fotos y se queda mirando las telas; para ella es como una cosa de princesas, pero no pasa por la vanidad".
En mayo pasado, la modelo, que residía en Buenos Aires -ya que Benjamín Vicuña estaba grabando La Dueña- le concedió una extensa entrevista a la de Chile. La charla rondó principalmente en la familia y su rol de mamá. El título de la nota, incluso, fue: "La maternidad me despojó del ego".
Pampita, allí, habló mucho de Blanca, de cómo la veía, de qué cosas compartía con ella y más: "Disfruto mucho con mis hijos, les damos tiempo de calidad. Tanto Benjamín como yo en eso somos superconscientes, tratamos de tener tiempo de calidad con cada uno, de ir al cine, salir a pasear, hacer programas para ellos, los llevamos al teatro y les cultivamos el lado artístico".
En ese momento, al igual que antes de la internación de Blanquita, la familia había vuelto de unas soñadas vacaciones: "Ahora venimos de tres meses de vacaciones en Miami, de estar todo el día juntos, sin ayuda, y volvieron con una paz interior increíble".
Sobre la pequeña Blanca, de seis años, su mamá, decía: "Heredó mi timidez. Ella es tímida y yo de chica era igual. Ella es muy femenina con sus cosas, es una lady, pero todavía no tiene desarrollado el tema de la vanidad. No es algo que le quiero inculcar y menos con mi trabajo. Me gustaría que lo vaya descubriendo con su inocencia y en el camino veremos. Prefiero inculcarle otras cosas, y no la vanidad. Todavía no se maquilla. Ella es mi compañera, somos muy unidas. A cualquier lado que voy viene feliz, me ha acompañado a producciones de fotos o a pruebas de ropa y se queda mirando las telas; para ella es como una cosa de princesas, pero no pasa por la vanidad, yo creo que le va a llegar, pero todavía no. Lo que estoy segura es que no se lo voy a potenciar. Lo que se dé naturalmente, fantástico, pero que vaya maquillada al colegio ¡de ninguna manera!".
"Con Blanca, que fue mi primera hija, aprendí a ser de una manera que ya con el segundo no quise repetir. Fui muy estricta con respecto a los horarios, sus comidas, quería que todo fuera natural y estaba jugando un poco a la mamá. Todo era nuevo, leía miles de libros, me fijaba en Internet".
Además, Pampita también confesaba que su vida estaba totalmente supeditada a sus hijos: "Me levanto con los chicos a las 6.45, que para mí es terrible, los llevo al colegio y vuelvo a dormir… ¡lo confieso, vuelvo a la cama! Almuerzo con Bautista, después voy a buscar a Blanca y la llevo a sus actividades: hace ballet y gimnasia y ahora tienen mucha vida social. Yo organizo mi agenda en función de la vida social de los chicos. Si tienen un cumpleaños tengo que ir, a todos, son parte de mi actividad del mes".
Blanca era la hija mayor de la modelo y Benjamín Vicuña, por eso, con ella tuvieron una experiencia muy especial: "Con Blanca, que fue mi primera hija, aprendí a ser de una manera que ya con el segundo no quise repetir. Fui muy estricta con respecto a los horarios, sus comidas, quería que todo fuera natural y estaba jugando un poco a la mamá. Todo era nuevo, leía miles de libros, me fijaba en Internet. Después con Bautista me fui relajando, entendí que eso no era tan importante. Y con el tercero supongo que me relajaré más todavía. Seguro va a comer papas fritas y tomar Coca-Cola antes que sus hermanos".
Pampita, embarazada de ocho meses de Beltrán (hace cuatro), analizaba: "La maternidad me despojó del ego. Ahora el ego pasa a otro plano. Cuando sos mamá la satisfacción no es por uno… no sé si por los hijos, pero sí por el proyecto de familia. Lo que más orgullo me da hoy en día es ver la familia que formamos. Ver a mis hijos crecer bien, felices, contenidos, con calma y alegría".