“Dar amor”. Con esas palabras, Sandra Mihanovich explicó ante la Justicia cuál era su interés por donar uno de sus riñones a su ahijada. Y, finalmente, luego de un largo camino judicial, la cantante se sometió el lunes 13 a una intervención quirúrgica y el trasplante se realizó con éxito.
¿Por qué las trabas legales? Sucede que la ley de Trasplantes prohíbe la donación de órganos o tejidos entre personas que no tienen un vínculo familiar directo, para prevenir la posible venta de los mismos entre desconocidos. De hecho, en los últimos cinco años sólo hubo 16 trasplantes de este tipo en el país.
El diario Clarín publicó parte de la sentencia firmada el 30 de julio por el juez Alejandro Jorge Nobili, donde no sólo se acredita que Sandra es la madrina de bautismo de la joven, sino que también se puede leer que “ese lazo, las declaraciones de los testigos y las de personas directamente involucradas dejan luz sobre el motivo altruista del acto, la solidaridad en que se funda y su gratuidad”.
Tanto Mihanovich como su ahijada se encuentran reponiéndose en un centro privado de Capital e Iván, hermano de la cantante, le dijo a Clarín: “Sandra salió bien de la operación, ahora necesita tranquilidad para reponerse”. Por otra parte, su ahijada declaró en la causa que estará eternamente agradecida por semejante acto de amor.