El artista español Ismael Serrano regresó a la Argentina para presentar Todo empieza y todo acaba en ti, su octavo disco de estudio en el que conviven todas sus influencias: Joan Manuel Serrat, Jaquín Sabina, Silvio Rodriguez y Damien Rice, entre otros.
¿Cómo sigue su tour por el país? A tomar nota: 10, 11 y 12 de agosto, en el Gran Rex; 14, en el Orfeo de Córdoba; 16, Mendoza; 18, llega a Mar del Plata; 28 de agosto, Bahía Blanca. Luego, repite Gran Rex el 31 de agosto y 1° de septiembre. Y se suma la función del 4 de septiembre, en La Plata, en el Teatro Argentino.
Lejos de los ruidos que contaminan el tráfico porteño, Ciudad.com se encontró con el músico en un cálido bar de Palermo y -café y chimenea mediante, para apaciguar la aspereza del frío-, su nuevo trabajo funcionó como puntapié para profundizar sobre otros universos que rodean el mundo artístico de Ismael.
SU NUEVO DISCO
- Estás presentando un disco que calificaste como "un nuevo comienzo". ¿Por qué lo consideras de esta forma?
- Decir eso fue más una declaración de intención, porque el disco no es rupturista respecto a los anteriores. Hay una continuidad, pero también una propuesta que pretende ser nueva en términos musicales y de contenido.
- ¿Con qué tiene que ver?
- Tiene que ver más con un estado vital en el que estoy y con la crisis (que atraviesa Europa), que inevitablemente traspasa cualquier historia que hoy por hoy uno quiera contar. Quizás en ese entorno de crisis lo que uno pretende es comenzar de nuevo, revisar el mundo que le toca vivir, y ser capaz de encontrar ese camino que conduce al lugar soñado. Y para eso hay que buscar en uno también. Por eso el título del disco, Todo empieza y todo acaba en ti.
“La música sirve para generar vínculos, para sentirnos menos solos”.
SU PASIÓN POR ARGENTINA
- Siempre tuviste un vínculo especial con Argentina, ¿qué te despierta este país?
- Hay una sensación de regreso a casa, aunque mi casa es Madrid, donde he crecido. Gran parte de mis mejores amigos y mi familia están de este lado del océano. Son quince años visitando y viviendo experiencias maravillosas.
- Tu pareja también es argentina… ¿Marplatense?
- No, es de Buenos Aires, de Palermo.
- En ninguna de tus canciones hablás de la paternidad, ¿alguna vez pensaste en tener hijos?
- Es algo que me gustaría, sí...
- Si tuvieras que elegir tres cosas de Argentina que quisieras llevarte con vos, ¿cuáles serían?
- Si con todos los amigos que tengo elijo el asado de tira o el tango, es para matarme. Yo elegiría a mis mejores amigos, a mis mujeres, a mi familia. Haber compartido escenario con Mercedes Sosa, León Gieco... Y ese empeño por levantar la mirada cuando las cosas se pierden. Y también el asado de tira, el dulce de leche y sus paisajes (ríe).
“Venir a la Argentina me genera una sensación de regreso a casa, aunque haya crecido en Madrid".
SOBRE GIRAS, MÚSICA Y POLÍTICA
- En las notas de prensa y en tu blog mostrás un perfil romántico y político, que a veces entra en contraste con otras visiones más livianas del arte. Dentro de esta búsqueda, ¿qué lugar le das a la diversión y al entretenimiento en tu vida?
- Por más que vivamos el espejismo de que somos felices, la evasión no deja de ser un espejismo. De repente, uno no es capaz de arrastrar ciertas frustraciones aunque a uno el reflejo le devuelva una cara sonriente. El compromiso político es la búsqueda de la felicidad. El ser consciente de la realidad no te convierte en un desgraciado.
- ¿Qué función social creés que tiene la música?
- La música sirve para generar vínculos, para sentirnos menos solos. Y en momentos de crisis como los actuales es muy saludable porque nos hace recuperar nuestra capacidad para influir en la realidad. Sobre temas que trata, yo creo que tiene que ser plural. En la vida hay un momento para la reflexión pero también para la evasión, para desconectar. La felicidad está en la búsqueda de ese equilibrio.
- Y a vos, ¿qué cosas te evaden o te hacen reír a carcajadas?
- Estar con mis amigos, ir al cine con ellos, de emborracharme en los mismos bares de siempre. Me evade lo que evade al común de los mortales... la sobremesa también. Yo la disfruto mucho cuando es con amigos. Además la charla, y el hacerme paso con lo vivido…
- Algo de eso pasa en las giras…
“Hay artistas que son capaces de contar sus relaciones de pareja, o cómo les gusta hacer el amor con sus mujeres, pero que son incapaces de definirse políticamente, como si eso les diera pudor".
- Sí. La convivencia es tan dura que es valioso que te sientas como en tu familia. Yo tengo la suerte de tener amigos en mi entorno que disfrutan como yo de la sobremesa, con una botella de vino hasta que el cuerpo aguante. Me hace feliz lo del común de los mortales. Lo que pasa es que a uno le preguntan por cosas que no son tan livianas.
- ¿Por qué creés que no te preguntan por cosas livianas?
- Creo que llama la atención cuando alguien se compromete de forma tan rotunda, cuando al mismo tiempo todo es tan liviano y superficial. Hay artistas que son capaces de contar con detalles cómo son sus relaciones de pareja, o de qué lado duermen en la cama, o cómo les gusta hacer el amor con sus mujeres, pero que son incapaces de definirse políticamente, como si eso les diera pudor. Hablo más que nada de la música en España.
- Si alguien que no te conoce y se encuentra con tus discos y tus escritos, ¿qué descubre o que quisieras que descubra?
- No lo sé… (se queda pensando) Creo que con alguien honesto sobre todo, que cree en lo que hace, que trata de ser consecuente con eso. Me gustaría que vieran como un tío amable y honesto que trata de hacer canciones sencillas, pero que te hagan encontrar esa heroicidad en la vida cotidiana que no siempre somos capaces de ver.
¡No te pierdas la videonota exclusiva con Ismael Serrano!
