No fueron horas fáciles para Moria Casán, acusada por una joyería de Paraguay de apropiarse de unas joyas valuadas en 80 mil dólares, que le habían sido prestadas para un evento en el país vecino, motivo por el que fue detenida y debió pasar la noche del sábado en la Comisaría N°17 de Luque.
Pero, fiel a su estilo, la diva se mostró de buen ánimo durante su detención -al subir fotos a twitter desde la comisaría- y antes de ingresar a declarar ante la fiscal Celeste Campos Ross.
Precisamente, luego de su declaración, Moria quedó en libertad y antes de dirigirse a la casa de Larissa Riquelme, donde pasará sus últimas horas en Paraguay antes de su regreso a Argentina, habló con la prensa que la aguardaba en la puerta de la fiscalía.
“La fiscal me dio la libertad”, aseguró Moria. “Por esa joya berreta me agarró alergia en el escote. Hablé con el Chato Prada y me dijo que están todos a mi disposición, que me quieren y que no pueden creer este mamarracho”, afirmó sobre su vuelta a Bailando 2012, donde bromeó diciendo que aparecerá con un “traje de presa”.
“Yo vine a poner, no a sacar, amo al pueblo paraguayo y como me tratan siempre. Terminé de trabajar, puse mis joyas en una caja, empezó a entrar gente que me vino a saludar y las cosas desaparecieron”, relató Casán sobre lo sucedido.
Pero mientras la fiscal decidió su liberación, ahora pide la detención de Luciano Garbellano, socio de la diva: “El está viviendo en Paraguay y va a colaborar con la fiscalía”, dijo Moria al respecto.
El pedido de detención de Garbellano -y también de Galo, el asistente personal de Casán- se debe a que era una de las personas que se encontraban en el camarín donde Moria se quitó las joyas tras el evento, según explicó la fiscal a TN. Además, aseguró que Moria queda sujeta al proceso y está en libertad hasta que aparezcan elementos que hagan que vuelva a ser llamada.
Mirá el video con las declaraciones de Moria Casán tras su liberación en Paraguay.