El miércoles pasado, Mónica Farro habló del drama que vivió durante cuatro años con su ex pareja, el conocido productor televisivo Jorge “Negrito” Luengo, cuando confesó haber sido víctima de episodios de violencia.
Invitada a Desayuno Americano para que sea parte del panel por ese día, la vedette dio detalles escalofriantes de su “enfermiza relación", como ella misma calificó. “Es lo peor que me pasó en la vida. Tenía agujeros en la cabeza de las extensiones que me sacaba, tres veces me desmayé. Limpiaba mi sangre de las paredes… Me quise suicidar dos veces el año pasado cuando surgió esto de las minitas que habían estado con él. Me pasaron cosas muy grosas, comía y vomitaba", fueron algunas de sus impactantes declaraciones.
Pero su relato fue interrumpido en más de una oportunidad por Rocío Marengo, panelista estable del ciclo de América, y en todo momento, la modelo insinuó que la uruguaya era también violenta con su pareja. Esto no sólo provocó un enfrentamiento entre ellas al aire, sino que Marengo fue muy criticada por su postura ante el drama de la uruguaya.
Por tal motivo, Rocío habló ante una cámara de Intrusos sobre este tema y no sólo justificó lo que dijo y por qué lo dijo, sino que esbozó algunas explicaciones: “No fue que la pinché a Mónica, sí fue un programa fuerte. Lo bueno es que ella se abrió a contar algo, tal vez en el lugar menos esperado. Yo no me imaginaba que de un comentario mío se empiece a soltar y lograron que ella se saque y empiece a abrirse, que abra su corazón”. Y añadió: “Yo lo que hago es buscarle la vuelta para que el invitado hable”.
“Yo tenía otra campana en mi teléfono, otra versión, y le decía cosas para que ella vaya diciendo si era verdad o mentira. Si realmente es como ella lo dice, es súper duro lo que vivió y no se lo deseo a nadie”, comentó. “El Negrito cuenta otra versión diferente. Si te tengo que decir algo de las dos campanas, es que escuche es que era una relación enferma. A una mujer no se la toca por nada del mundo… Y la mujer también reaccionaba, terminaba siendo algo enfermo de los dos”, dijo Rocío, aunque luego aclaró: “Yo no me quiero meter” (?).
Allí, Marengo agarró su celular y comenzó a leer los mensajes que recibió de Luengo: “El la dejó y se fue porque no quería discutir con ella, (dice) que ella lo buscaba. Y que en Carlos Paz, cuando ella se separó del marido, éste la agarró del cuello y rompió un placard”. Luego leyó textualmente los SMS: "Mi error fue tratar de callar cada insulto de ella… Era violenta… El diente se lo rompió mordiéndome, eso decilo".
Entonces, Daniel Ambrosino le dijo que la versión de Farro fue que ella lo mordió porque él la habría querido ahorcar, a lo que la modelo le respondió: “Bueno no sé, yo no soy la vocera. Andá a hablar con él”.
“Yo no defiendo ni a él ni a ella, esto es una historia que pasó. Si realmente la golpearon, estoy del lado de Mónica. Pero yo no me voy a meter en una historia que es de ellos, yo contaba la otra campana”, dijo Rocío. Y cerró: “Hoy más que nunca tiene que estar tranquila porque si la golpearon, ahora está protegida”.