La muerte de Alicia Zanca impactó al público, que desconocía su larga lucha de dos años contra un cáncer de colon. Su círculo íntimo, en cambio, acompañaba de cerca a la querida actriz en el duro momento de salud que le tocaba atravesar.
Georgina Barbarossa, su gran amiga, fue una de esas personas que se mantuvieron al pie de cañón junto a Alicia. Por eso, Zanca la acompañó el pasado 2 de julio -tan sólo 21 días antes del triste desenlace- cuando Georgina recibió el Premio Podestá 2012 a la Trayectoria Honorable.
Alicia fue la encargada de entregarle el galardón junto a Lito Cruz en el Salón Azul del Congreso Nacional. Entre otros, también habían sido reconocidos Diego Capusotto, Gabriela Toscano, Luis Brandoni, Claudio García Satur y Rodolfo Bebán.
Un momento inolvidable para Barbarossa, que hoy acompaña a la familia de su amiga, y que lamentablemente se transformaría en la última aparición pública de la querida actriz.