lograron cumplir su sueño: participar en Y junto a la traumática experiencia que vivió Verónica Perdomo (quien ya cosechaba de una carrera en los medios de comunicación), sus historias de vida hasta hace muy poco "anónimas" conmovieron al público de ShowMatch.
Ella tiene 21 años y nació con síndrome de Down. Él tiene 37, es oriundo de Colombia y perdió su pierna izquierda por complicaciones de su nacimiento. Y ambos lograron dejar atrás sus propias dificultades para seguir adelante. Conocé acá sus historias.
En dialogo con la revista Gente, Reinaldo Ojeda contó: "Nací mellizo, y el cordón umbilical se me enredó en la pierna izquierda. Me quedó atascada y se dañó. Seis meses después, tomaron la decisión de amputarla. Pero mi niñez fue muy sana. Jamás en mi casa hubo un 'no lo haga', ni un complejo de inferioridad. A los cuatro años, mi papá me llevó mis primeras muletas y me acostumbré a una. Y así seguí. Me adapté fácil: Dios quiso que saliera muy hábil. Incluso aprendí a jugar al fútbol con mis primos. Cuando salí de mi casa, comprendí que había otro mundo".
De acuerdo a lo que relató, Reinaldo trabajó en un call center y luego en una cadena de supermercados. En el 2000 empezó a hacer ciclismo (hasta compitió para la Selección en los Paralímpicos de 2004, en Bogotá), pero nada lo convencía hasta que encontró su pasión en el baile. Y así se lo relató a la publicación: "En el 2004 tuve una llamada para un certamen en Brasil. Me habían visto en un video de YouTube. Y pensé: 'Quiero dedicarme a esto'. Empecé a participar de concursos, pero muchos me rechazaban por mi discapacidad. Sólo querían que hiciera exhibiciones. Así que dictaba clases, montaba shows para empresas, pasaba la gorra en boliches. Estuve en Chile, Costa Rica, Miami, Los Angeles, Italia, Holanda, Singapur, Japón. Iba y hacía exhibiciones".
Hasta que llegó a Bailando 2012. Tinelli se interesó en su historia y lo convocó a participar en el certamen de baile más importante junto a Valeria Archimó. Feliz por estar en el show, Ojeda confesó: "Jamás pensé recibir tanto cariño del pueblo argentino. No me ven como un discapacitado. Me estoy sintiendo igual que todos: demostrando que no existe la limitación, que también me toca pelearla, afrontar el cansancio físico, aguantar los bajones... Quiero llenarme de fortaleza para llegar a la final".
Y, por último, reflexionó: "Todo el mundo tiene problemas, pero me ven bailar y las cosas cambian, los pensamientos cambian. Dicen: si él puede, yo también puedo hacer mi vida más feliz. Estoy muy agradecido de lo que la vida me dio, de la fortaleza que me inculcaron mis padres. Y Dios quiso que fuera acá, para darle un ejemplo de vida a mucha gente. Que sí se puede".
Por su parte, la revista Caras entrevistó a Ayelén Barreriro, quien llegó a Bailando de la mano de Pía Soldati, presidenta de la fundación Nuevas Olimpíadas Especiales de la Argentina. De novia desde hace 8 meses con su compañero de colegio Facundo, la joven de 21 contó que hace patín artístico desde los 8 años, disciplina con la que llegó a convertirse en una de las atletas líderes de la fundación.
Su bailarín, Franco Cadelago (30), también habló con la publicación e indicó que Ayelén tiene facilidad para aprender en horas los pasos marcados. "No sentimos que hubiese demagogia en el programa. Ella viene a demostrar que se puede, qe no importan las capacidades diferentes y que puede haber inclusión".
A su vez, Soldati contó cómo llegó al programa de Tinelli: "Buscaban a una chica atleta con capacidades diferentes. Fueron a un casting y nuestra patinadora quedó. Aprendió la coreografía en sólo 2 horas. Así podemos aprender uno de otros para hacer cada día las cosas mejores y generar más inclusión".
La pareja entrena entre 2 y 3 horas diarias. Y Ayelén, que la rompió en su debut en la pista de ShowMatch, confesó que la fama le gusta: "En la calle, la gente me reconoce. Me filma, me pide sacarse fotos conmigo. Y eso me gusta mucho".