El paso del tiempo no afecta a Max Berliner, el vital actor de 92 octubres (cumple el 23 de ese mes) que en la entrega de los Martín Fierro 2012 fue homenajeado por sus 87 años de prolífica trayectoria artística, que inició a los 5.
Alegre y jovial, Max se prestó a una entrevista íntima con Ciudad.com, en la cual expresó su felicidad por el reconocimiento de Aptra y además reveló sus secretos para transitar la vejez con su envidiable estado físico, mental y espiritual.
-¿Cómo se mantiene tan entero a su edad?
-Hay muchas formas. Yo me mantengo caminando, creando, no comiendo mucho, no chupando, no fumando y no drogándome. De la misma forma que hay que existir. Sino, el que se droga, el que no hace cosas, no camina, come de todo y se emborracha, no puede llegar a esta salud que tengo yo.
"Siempre dejo algo para mañana, para tener un motivo, una causa de respirar, de seguir viviendo y de crear".
-¿Qué sensaciones le dejó el premio?
-Estoy re contento por el premio. Estoy re contento de que una escuela donde yo trabajé 50 años, donde enseñé teatro a chicos de cinco años, secundaria, primaria, jardín, me reconocieron porque la sala donde estuve ensayando se convirtió en teatrito y lleva el nombre de Max Berliner en vida. Eso es un recuerdo increíble. Es la Escuela Scholem Aleijem, en Serrano 341.
-Max, tan vital y jovial que se lo ve, ¿cómo está del corazón?
-Perfecto. El último estudio me dio perfecto.
-¿Y a nivel sentimental?
-Trato de recuperar el desgaste físico de otra forma, ¿me entiende? Mis sueños son los fantasmas, me aparecen los fantasmas increíbles por una obra que estoy haciendo, por una obra que voy a hacer. Yo hago Mateo, es una obra que hago de caballo, es creatividad propia el personaje. Entonces en el sueño me aparece el caballo, camina, como anda, como come, como va todo eso es en sueños. Por eso no duermo bien, pero me hago una buena siesta y recupero el sueño, es decir, nunca me dejo vencer. Sigo luchando lo mío.
"A los jubilados les diría que no se queden sentados y digan ‘chau’. ¡No! Seguir. Si te quedaste sentado, cagaste".
-¿Cuál sería la clave entonces?
-Hay un refrán que dice ‘no dejes para mañana lo que podés hacer hoy’. Yo siempre digo que hay que dejar siempre para mañana, porque sino cuando te levantás no tenés nada para hacer. Siempre dejo algo para mañana, para tener un motivo, una causa de respirar, seguir viviendo y de crear.
-¿Qué les aconsejaría a los jubilados?
-Que no se queden sentados y digan ‘chau’. ¡No! Seguir. Si te quedaste sentado, cagaste.
¡Mirá la video entrevista exclusiva de Max Berliner con Ciudad.com!