Fue una de las galas de expulsión de Gran Hermano más movidita de los últimos tiempos. Lucas abandonó la casa por decisión del público y Fabricio, uno de los gemelos, apretó el botón rojo y se fue voluntariamente del juego. Por si algo faltaba, Ezequiel y Leandro, que estaban en la casa de al lado, reingresaron al hogar principal.
Sin embargo, esto no es nada a diferencia de lo que sucedería en el final de la trasmisión del programa: un hecho que excede al juego.
Jorge Rial le anunció a Leandro y Ezequiel que debían reingresar a la casa. Luego, el conductor se despidió de los televidentes y les pidió que se quedaran, porque iban a mostrar imágenes del reingreso de los polémicos participantes. Sin embargo, esas imágenes nunca llegaron, porque Telefé, en ese preciso momento, decidió darle comienzo a CQC y su último programa en vivo.
El conductor, sin filtros y muy enojado, estalló en Twitter y se descargó con Telefe. "Jugamos todo un partido y no mostramos el gol. A esta televisión no la entiendo. A casa a bajar la calentura". Y concluyó: "Lamento lo que pasó hoy en Gran Hermano 2012. Me sorprendí y enojé tanto como ustedes. Gracias, pero hasta acá".
El escándalo no terminó allí ni por asomo. Esta mañana, en su ciclo por La Red (Ciudad Goti-k), redobló la apuesta y aseguró: "Para mí, internamente y sentimentalmente, fue la última gala de Gran Hermano. Ya se lo comuniqué a Tomás Yankelevich", enfatizó.
"Este Gran Hermano nació con unos problemas de programación, de adelantamiento de su salida al aire, pese a que es un programa de verano en todos los lugares del mundo. Y el problema es que se está tardando más en que el público conozca a los chicos y sus historias de vida. Ayer habíamos logrado armar un excelente programa, y se había dado una situación increíble, que era que uno de los gemelos, Fabricio, tocara el botón rojo, por lo que se armaba un panorama precioso, al entrar dos chicos de la casa de al lado, y justo Ezequiel y Leandro, dos jugadores fuertes, además de la historia de amor de Ezequiel con Victoria, quien luego estuvo con Daniela", explicó Rial. Pero...
"Cuando se había logrado crear el clima, no se pudo ver el momento en que entraban los dos chicos a la casa. Y personalmente sentí que había relatado un partido durante dos horas, y cuando teníamos que mostrar el gol, no lo mostramos. La bronca que tiene el televidente, la tengo yo también. Me dolió mucho. No me fui feliz y se lo hice saber a Tomás (Yankelelevich), el responsable de la programación del canal", puntualizó el conductor.
"Como en un equipo de fútbol, cuando pasa algo no se pueden ir los 11 jugadores porque es una locura. El fusible es el técnico. Y en la tele, el técnico vendría a ser el que pone la cara. Por eso me quiero hacer el responsable públicamente, lo sea o no, de lo que sucedió ayer. Entonces no quiero seguir al frente de Gran Hermano. Esta decisión ya la comuniqué y espero que me la acepten. Y no tienen que ver los números, porque me los banco (N de la R: anoche promedió 11.6 puntos contra 20.5 de la final de Cantando 2011). Tuve 50 puntos y también 3, así que nadie puede correrme con el rating. Pero ayer me sentí muy mal. Ya hubo algunas cosas que se trataron en la intimidad. Pero lo de ayer no lo quiero volver a vivir. Sentí que se rompió algo".
¿Habrá sido la última gala de Jorge Rial en Gran Hermano 2012? El, por lo pronto, aclaró que "por ahí hago la gala del miércoles, porque tampoco uno se puede ir de un día para el otro. Pero para mí, y ya en frío, no en caliente, más allá de que conduzca alguna más, la de anoche fue la última gala. Y lo lamento porque hay un grupo de laburo infernal. Los tendrían que cuidar un poco más...".