Maximiliano Guerra (44) pasa por un momento de angustia: a mediados de octubre pasado, su mujer, la también bailarina Patricia Baca Urquiza (34), sufrió un infarto arriba del escenario, según informa la revista Pronto en su última edición.
Patricia sintió un fuerte dolor en el pecho en plena función de la obra Carmen; pero a pesar del malestar, ella siguió la función, ya que estaba por terminar. Cuando fue al camarín los dolores eran cada vez más fuertes, por lo que fue trasladada inmediatamente en ambulancia hasta una clínica.
Allí, los médicos le dijeron a Maximiliano que su mujer había sufrido un infarto y que su vida había estado en serio peligro. El 15 de noviembre último, Baca Urquiza fue sometida a una angiplastia en la que le colocaron cuatro stents, y el 22 de ese mes fue dada de alta, puntualiza el semanario.
Según determinaron los médicos, Patricia llegó a esta situación porque sufría una cardiopatía muy infrecuente, que sólo padece una persona entre cientos de miles. Los médicos le recomendaron una serie de análisis clínicos para determinar con más exactitud su estado de salud.
Además, los doctores le prohibieron bailar hasta tanto no se tenga un diagnóstico certero, y por el momento no sabe si podrá volver a los escenarios.