Rodeada de naturaleza y alejada del fulgor de la ciudad, vive su nueva maternidad a full.
Casada desde hace 14 años con Matías Camisani (41), su compañero de vida, la modelo recibió a Suria, su cuarto hijo varón, que llegó para sumarse al clan familiar, que se completa con Valentino (10), Salvador (7) y Milo (5).
“Sus hermanos recibieron muy bien la llegada de Suria. Sólo Milo está un poco celoso porque, hasta ahora, era el más chico de la casa”, le contó Dolores a la revista ¡Hola! Argentina, que retrató a la feliz familia en su casa de Ingeniero Maschwitz.
Fanáticos de la cultura de la India, el nombre del recién llegado bebé, extraño por cierto, fue elegido minuciosamente por los padres en una librería Katmandú. “Tuvimos que hacer un trámite en la Embajada de la India, donde nos dieron un certificado que explica el significado de Suria (“Dios del sol”) que es una palabra en sánscrito. Eso porque es el primer Suria anotado en Argentina”.
Diosa desde siempre, dueña de las piernas más bellas del mundo del modelaje, Dolores planea su vida después de los primeros meses de Suria. Sin temores, afirma: “Aunque la genética me ayuda a volver a estar en forma rápido, yo hago mucho para recuperar mi cuerpo después de cada embarazo: camino, nado, practico yoga, soy vegetariana y como muy sano”.
Dedicada desde hace algún tiempo a su propia marca de ropa, Holi, Barreiro continúa involucrada en su proyecto personal y confiesa que pasa varias horas adentro de su local, ubicado en Recoleta. “Me encanta el trato con la gente. Sugerirles qué ponerse, con qué combinarlo, cómo usarlo. Lo que más disfruto es cuando viene una chica buscando el vestido para la fiesta de graduación o el traje de 15 años”, cuenta.
A simple vista, Matías Camisani y Dolores Barreiro están en su mejor momento. Cuatro bellos niños y 14 años de casados a cuestas lo demuestran. Y por si quedan dudas, ellos lo confirman: “Logramos una familia soñada”.
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