Marina Calabró se pasó del otro lado del mostrador y, en vez de ser ella quien pregunta, como lo hace tarde a tarde en Infama, esta vez tuvo que responder.
Fue en la revista Paparazzi, donde la periodista habló de los rumores de crisis con su pareja y padre de su hija, Martín Virasoro.
Marina y Martín se conocieron en 2007, en Patinando por un sueño (certamen en el que él era coach general), se enamoraron y rápidamente se fueron a vivir juntos. Luego, en 2009, llegó Mía, la primera hija de ambos.
"¡Nunca hubo crisis! Si estuviera separada, lo blanquearía", concluyó Marina.
Hoy, con cuatro años de relación, Marina y Martín siguen igual que juntos que antes, y echan por tierra cualquier especulación contraria: "Dormimos todas las noches juntos y se la pasa todo el día trabajando. Además tiene el consultorio (psicológico) a dos cuadras de casa", dijo Marina a la revista.
Además, ella misma explicó por qué se habían generado los rumores de crisis: "Es cierto que tenemos -quiero decir que Martín tiene- un campo en Castelli, donde vamos los fines de semana. A principios de mes, Martín viajó para encargarse de un arreglo que necesitaba la estufa de tiro balanceado que hay en el cuarto de Mía, pero fue y vino en el mismo día. Y la semana pasada, específicamente el jueves, también fue para allá porque un paisajista está renovando el jardín y se quedó a dormir porque no quería dejar el asunto en manos de los caseros. Yo no pude acompañarlo porque tenía mis compromisos en Capital. Tenía que ir al programa, no puedo faltar por un jardín...".
Pero si aún no quedó del todo claro, la periodista (a quien se la ve más sexy que nunca) concluyó: "¡Nunca hubo crisis! Si estuviera separada, lo blanquearía".