El mundo puso los ojos en una nueva boda real. Curiosos, fotógrafos, cámaras y muchos televidentes alrededor del planeta vieron cómo Cayetana Fitz-James Stuart, una excéntrica señora de 85 años, más conocida como la duquesa de Alba, finalmente se casaba con Alfonso Díez Carabantes, un plebeyo de 60 años. Todo, en una íntima ceremonia en Sevilla, España.
El flamante duque conoció a su esposa hace más de 30 años, pero hubo un reencuentro hace cuatro, a la salida de un cine, como cualquier hijo de vecino. Y en agosto de este año, la pareja de novios anunció que se casarían en poco tiempo.
La duquesa de Alba es dos veces viuda y tiene seis hijos, que, en un principio se opusieron al enlace. Ella, para contentar a todos, decidió que gran parte de fortuna se las dará a ellos, que también recibirían títulos de Grandeza de España.
El novio, por su parte, percibirá una pensión anual de por vida y será duque de Alba consorte hasta la muerte de la duquesa, cuando el título pasará a su hijo mayor.
La boda se realizó en la capilla del Palacio de las Dueñas, en Sevilla y estuvieron presentes cuatro de los descendientes de la duquesa y algunos otros familiares y amigos.
El vestido de la novia, con el estilo hippie chic que la caracteriza, fue diseñado por los sevillanos Victorio & Lucchino, en tonos rosados y con un cinto verde. Los zapatos elegidos fueron de la también española Pilar Burgos. El novio, mientras tanto, lució un elegante traje gris, con chaleco y corbata oscura con pintitas blancas, haciendo juego con el pálido pañuelo que llevaba en su saco.
A pesar de las críticas de su entorno (se dice que hasta el Rey de España la habría llamado) y su familia, la duquesa Cayetana de Alba decidió casarse con Alfonso Díez Carabantes, contestando: "Como siempre, haré lo que me dé la gana".
Ahora, sí, por fin, son marido y mujer.
¡Mirá las fotos del casamiento de la duquesa de Alba!