Una mujer está destruida, la otra aprovecha su minuto de fama, y él disfruta despreocupado esperando instalarse en Europa. Cinthia Fernández no logra asimilar el duro golpe que sufrió tras comprobar que a días de terminar el noviazgo con Jonathan Ferrari, el defensor de San Lorenzo ya se paseaba con Victoria Santos.
“Estoy hecha pelota… era como que habíamos cortado pero segúiamos hablando… pero si a los tres días aparece con otra mina digo ´tan necesitado estabas de estar con alguien físicamente Jonathan´. Aparte una mina así…”, disparó Cinthia entre sollozos en el movil de Viviana Canosa.
Y ya completamente quebrada mientras las lágrimas le corrían el maquillaje, Fernádez manifestó indignada: “Le tuve que pedir que me pida perdón. Me estoy comiendo un garrón que no me tengo que comer. Estoy en un momento re lindo de mi carrera y yo soy la pública, obviamente me van a venir a buscar a mí”.
Minutos después, también en el programa de Canosa, Victoria Santos dio su versión de los hechos: “Yo no sabía que Jonathan estaba saliendo con Cinthia. Lo conocí en el boliche que trabajo, me lo presentaron. Ya nos vimos varias veces en lugares públicos. El mencionó Cinthia recién cuando estábamos en mi casa… ahí hicimos lo que dos adultos hacen”.
Victoria además aprovecho y tiró una bomba: “Ferrari me dijo que tengo mejor cola que su ex... porque yo no la tengo operada, yo conozco al cirujano. Le inyectaron un poco de grasa de su propio cuerpo y algo más. Fue algo que me dijo en la intimidad. Nos seguimos conociendo con Jonathan”.
Pero para dejar en claro que llegó a los medios para quedarse, Santos demostró sus dotes artísticos: “No le creo nada a Cinthia, son lágrimas de cocodilo. Y si me manda a actuación, ella debería hacer mucho más. Yo hago comedia músical, actúo hace mucho tiempo…”, y luego se despidió entonando eres el amor de mi vida.
Lo cierto es que mientras CInthia llora y Victoria cobra fama, Jonathan Ferrari mantiene el perfil bajo esperando que se concrete la transferencia a Europa.
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