El escándalo farandulesco de la semana suma hoy un nuevo capítulo. Un rumor, una tapa, varias versiones, desmentidas a granel y ahora parece que todo podría terminar en Tribunales.
El martes pasado, la versión de una fuerte crisis en el matrimonio de Wanda Nara y Maxi López, desató una polémica que con las horas se acrecentó. La tapa de la revista Caras, con el título “Maxi me decepcionó”, acompañada de una fuerte versión sobre trámites de divorcio, hizo explotar todo por el aire.
El primero que rompió el silencio fue Andrés Nara, en exclusiva por Ciudad.com: "La confusión es por un allegado que anduvo con cuatro chicas". Allí daba la primera pista sobre que había un tercer involucrado en esta historia. La vedette salió a desmentir todo por Twitter y su abogada Ana Rosenfeld intentó calmar las aguas.
Una amiga de Wanda, Micaela Pozzi, le puso nombre y apellido a todo, en especial al representante del delantero del Catania: Darío Bombini, quien forma parte de la empresa de representación de deportistas y artistas IMG. "Maxi y mi marido (N de la R: el futbolista argentino, también del Catania de Italia, Cristian Llama) fueron a jugar un partido y llegaron a las dos de la mañana. Maxi se fue a dormir y le llegó un mensaje, que ella leyó y decía que por favor suba que estaba con cuatro señoritas y quería hablar sobre su posible venta a la Fiorentina y que además había comprado unas cervezas".
La versión de Micaela fue confirmada por el padre de la vedette y yerno de Maxi. En una nota con el ciclo PM, don Nara aseguró: “El manager quiere que Maxi se separe de Wanda. El fue el que montó el escenario con las cuatro mujeres. Maxi no fue, es un pan de Dios, un caballero”, contó.
Ahora, y según pudo averiguar Ciudad.com, Bombini está analizando demandar a Andrés por sus dichos, ya que se sintió injuriado. Para eso, ya habló con su abogado, Fernando Burlando, para que vea los videos con las declaraciones del padre de Wanda.
Mientras tanto, el manager, por recomendación de la empresa, habría dado un paso al costado y no sería más el representante de López. Además, el contrato de Maxi con IMG termina en noviembre próximo y todavía no se sabe si continuará ligado a ellos o cambiará de manager.
¡Sí, señores! Parece que este escándalo viaja de Catania a Tribunales sin escalas.