Luisana Lopilato y Michael Bublé llegaron a la Argentina sin levantar la perdiz, pero no pasaron desapercibidos y fueron descubiertos por los paparazzi. La pareja no paró ni un minuto y estuvo por varios lugares de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
La actriz está desde hace 15 días en nuestro país y el canadiense llegó el lunes pasado, luego de concluir su gira por México, según informa el diario Clarín. Ella vino especialmente para visitar a su familia, pero además tuvo varios compromisos sociales y laborales.
Lopilato se reunió con Paul Kirzner, hermano de Adrián Suar, para hablar de trabajo. La cita fue en Osaka, en Palermo, por pedido explícito de Bublé, que tenía antojo de sushi. Parece que en Pol-ka quieren contar con ella para una ficción el año que viene. Aunque todavía no hay nada definido, la actriz y Paul quedaron en volver a encontrarse y seguir con las tratativas, según publicó la revista Paparazzi.
Luego de eso, la pareja se fue hacia Barrio Parque, rumbo al Malba. Allí dialogaron con Eduardo Costantini, dueño del exclusivo museo. Michael habló con el empresario sobre la pasión que los une: el golf. Aunque también conversaron de obras de arte y al parecer, el cantante quiso saber si había algún cuadro a la venta pero la respuesta fue negativa, asegura Clarín.
Como si todo esto fuera poco, Luisana está preparando una súper fiesta… ¡No, no se casa otra vez!. Ahora quiere celebrar cuando alcance el millón de seguidores en Twitter: ya pasó los 950.000. A pesar de una gripe que la tuvo en cama, ella quiere organizar un gran festejo. Aún no se sabe dónde será, pero quiere que sea totalmente gratuita.
La pareja ya prepara para el viaje retorno hacia el norte de América, pero volverán muy pronto. Y seguramente, con novedades.