Su muerte causó conmoción y mientras los fans de Amy Winehouse aún no se recuperan de la pérdida, su entorno se disputa los millones que dejó la exitosa cantante inglesa de soul. La suma total de la herencia, es de 25 millones de libras, que han sido destinados a su familia, compuesta por sus padres y su hermano.
El ex marido de Amy, Blake Fielder-Civil, finalmente no recibirá un centavo de la fortuna ya que luego de la separación, en el año 2009, la cantante lo había eliminado de su testamento. Sin embargo, él solicitaba cobrar regalías por el exitoso disco “Back to black”, que tras la muerte de Winehouse ha regresado a la cima de los charts.
Actualmente, Fielder-Civil se encuentra pagando una condena de 32 meses en prisión por robo y otros delitos. Según trascendidos de su familia, está devastado por la triste noticia y porque no lo dejaron salir de la cárcel para asistir al funeral de su ex mujer.
La pareja comenzó su relación en 2005 y se casaron dos años después, pero sus declaradas adicciones los llevaron al divorcio en 2009. La madre de Blake, Georgette, afirmó a los medios: “En mi corazón, creo que mi hijo tiene que adjudicarse parte de la culpa por su temprana partida. No puedo decir si Amy consumía o no drogas antes de conocerlo, eso es algo que nadie sabrá nunca”.
Sin embargo, el propio Fielder-Civil había confesado en el pasado la mala influencia que ejercía sobre su por entonces mujer: “Yo arrastré a Amy a las drogas y sin mí no hay duda de que ella nunca se habría hundido. La introduje en la heroína, el crack, la cocaína y la autodestrucción. Me siento más que culpable”, reveló antes de separarse.