Catherine Elizabeth "Kate" Middlenton, la futura esposa del príncipe Guillermo de Inglaterra romperá las reglas en su boda y, a diferencia del tradicional peinado de cabello recogido, planea un estilo que para este tipo de evento es considerado toda una transgresión.
Para la realeza, el cumplimiento estricto del protocolo en cualquier ceremonia es una obligación moral, por no decir casi una cuestión de Estado. Sobre todo cuando se trata de una boda Real sobre la que estarán posados los ojos del mundo entero.
La tradición de las novias de la realeza dicta que deban llevar el cabello recogido, sin embargo, está previsto que la llegada de Kate a la Abadía de Westminster, donde dará el “si” al hijo mayor de Carlos de Inglaterra, será con el cabello suelto.
Así lo afirmó el nuevo ‘peluquero real’, James Pryce, de 33 años, que trabaja en el salón de belleza Richard Ward, en Chelsea, y quien será el encargado de peinar a Catherine.
“Llevará el pelo suelto. Será muy natural y fluido”, afirmó el peluquero elegido por la novia. Según la prensa británica, el estilista apostará por el peinado favorito de la futura princesa: melena suelta y algunos mechones ondulados, aunque no dudará en aportar su toque personal con algún detalle sorpresa. "El peinado de una novia tiene que reflejar su estilo y Kate es una mujer muy natural, así que nunca podría llevar algo demasiado recargado", dijo Pryce.