Mel Gibson mantiene bajo amenaza a Ross Suelden, el médico que reparó los dientes de su ex novia, después de que le golpeara la cara.
De esta manera, debido a que el caso se mantuvo como una prueba de imágenes de mujeres con los dientes rotos, el actor se encargó de intimar al médico.
Es por eso que, Mel Gibson amenaza al dentista cada vez que pueda.