Como ya te contamos, Cheryl Cole, está enferma de malaria y su salud preocupa.
Ahora que está un poquito mejor y su vida no corre peligro, los médicos le prohibieron a la cantante que tenga sexo. Y no sólo eso no puede hacer, sino nada que la altere y le haga subir la presión.
“Ella se rió cuando le dieron la noticia de que no podría tener sexo. Es lo último que tiene en mente en este momento. También le pidieron que evite el alcohol en las próximas semanas”, publicó el diario The Sun.
Cole ya está en su casa, luego de su internación en Londres por la malaria que contrajo en Tanzania.
Ahora Cheryl descansa tranquilamente —sí ya entendió, nada de farras y fiestas— en su casita de 10 millones de dólares en Surrey, Inglaterra.