Más de 15 años tuvimos que esperar para volver a ver a una de las bandas más emblemáticas del Rock, pero sin dudas, la espera valió la pena. Guns N Roses se presentó anoche en Vélez ante 45 mil personas con un show intenso, durante 2 horas y media.
El repertorio fue completo. No faltaron los clásicos como "Welcome To The Jungle", "Sweet Child O´ Mine", "You Could Be Mine", "November Rain", Patience", "Don t Cry", ""Knockin´ On Heaven´s Door", "Paradise City", así como temas del tan ansiado álbum, "Chinese Democracy", destacándose los nuevos hits "Madagascar", "Better", "Sorry" y el tema homónimo al disco.
Con un repaso de la historia de los Guns, se escucharon 7 de las 12 canciones que componen el disco debut de la banda, "Appetite for Destruction", dejando sólo de lado "The Spaghetti Incident", último trabajo de aquella formación que visitó Buenos Aires en 1994. Sólo los más exigentes pueden reclamar algún que otro tema, como por ejemplo "Civil War".
En cuanto a la ex formación de la banda, hay que destacar que no fue ni es tarea fácil reemplazar a Slash: Esa imagen única donde los rulos tapan los ojos, el cigarrillo asoma por la boca y el sombrero aparece en forma de galera. Y es que, estamos hablando de uno de los pocos guitarristas que crearon su propio sonido, dueño de ese tono insuperable, lleno de notas estiradas con puro feeling. Axl reclutó, luego de varios recambios, a DJ Ashba y Ron Thal (alias "Bumblefoot") para cubrir ese espacio y lograron resguardar técnicamente el rol de guitarrista líder o solista. Pero así todo Slash, al igual que el bajista Duff McKagan, conformaron lo más añorado de la cita en Vélez.
Sin embargo, no hay que desmerecer a la nueva formación. La mitad de sus miembros no participaron de las sesiones de grabación de "Chinese Democracy" y los rendimientos individuales fueron muy buenos. Es cierto que hubo ciertos arreglos de temas ("Live and Let Die", "Night Train", el intro de "You Could Be Mine") que no convencieron mucho, pero parecen ser un legado de Buckethead, el virtuoso guitarrista con un balde en la cabeza. Un tip para los más fanáticos.
Lo cierto es que, Axel ya no es el de trencitas y sobrepeso que impactó 8 años atrás en el "Rock in Rio" y los "Mtv Music Awards". Tras mejorar su imagen-con ciertos guiños al pasado- logró rearmar una banda que muchos daban por perdida. Puede que su voz no sea la misma pero sigue siendo el frontman irascible y apasionado de los Guns N Roses que emociona con sus típicos pasos arriba del escenario.
Pero no todo fue color de "roses" en la noche de la vuelta de los Guns, y hubo tiempo para los problemas. Afuera del estadio, hubo incidentes en el ingreso, donde fanáticos sin entradas se enfrentaron con la policía terminando con varias decenas de detenidos.
Otro de los inconvenientes tuvo que ver con el sonido. Desde el campo no se escuchaba la voz de Axel Rose, lo que generó descontento en el público. Arrojaron objetos al escenario para dar aviso de la situación, pero la interpretación del líder de los Guns fue otra y detuvo el show para pedir calma y amenazar con irse si continuaban lanzando cosas. Los fans se calmaron, pero el sonido se mantuvo imperfecto. Aún así, la banda cumplió con las expectativas. Misión cumplida para los Guns N´ Roses en Argentina.