Juana, la hija de Mariana Brey y Pablo Melillo, cumplió cinco años. Su mamá, siempre muy cariñosa con su familia, posteó en Instagram fotos retro y actuales para saludar a su hija en su día especial. “Pasaron cinco años ya y se me deshace el corazón de tanta emoción”, anunció, muy emocionada.
Acto seguido, recordó cómo fue descubriéndose en su rol de madre. “Un día como hay atravesabas todo mi cuerpo para hacer de mí una nueva mamá. Fui una mamá asustada. Llena de miedos e inseguridades. No sabía si iba a poder. Si estaba preparada. Un miedo que me hacía sentir vulnerable frente al Universo, que me cortaba la respiración. Ese miedo que paraliza. Claro que no era primeriza. Nada igual había vivido en mi primer embarazo, mi primera maternidad. Ahí sí que fui una topadora”, aseguró.
Acto seguido, afirmó que su nena es fruto de un amor “apasionado, arrollador e imperfecto”, en referencia a su relación con Pablo. “Pero esta vez fue distinto, porque todos los hijos son distintos y llegan con diferentes propósitos. Vos rompiste estructuras y me sacudiste fuerte. Sos el fruto de un amor apasionado, arrollador e imperfecto. De esos que solo se viven una vez. Un amor que venía con muchos planes, pero que también se dejaba llevar como el viento. Sabíamos que vos nos unirías para toda la vida y si, creo que eso era lo que buscábamos como equipo”, sumó, a corazón abierto.
MARIANA BREY ADMITIÓ QUE SINTIÓ MIEDO DE CONVERTIRSE EN MAMÁ POR SEGUNDA VEZ
En este contexto, Mariana reveló que le costó la decisión de volver a ser madre.
“Un día papá me dijo que soñaba con tener más hijos y con volver a formar una familia, pues su deseo fue tan tan tan grande que se cumplió. A mí me costaba más admitir ese deseo, tiempo después entendí que era algo llamado miedo que interfería entre mi deseo y yo. Sobrevino una intensidad avasallante y el vértigo de un vínculo que llevaba poco tiempo. A mí me daba miedo, mucho miedo. Estaba cagada en las patas, es así. Papá iba a fondo y lo logramos”, escribió, sincera.
Y se despidió remarcando que pese a sus idas y vueltas con Pablo, conforman una hermosa familia de la que está orgullosa. “Fue así que llegaste a la vida y a nuestro mundo un día como hoy hace 5 años. Le digo gracias a papá por animarte a amar como lo hiciste. Con errores y aciertos. Pero lo hiciste. Cuando naciste ese miedo desapareció y fui empoderándome día a día. Con vos aprendí que no hay límite para amar, que el amor es infinito y que está acompañado de armonía y paz. Hoy somos compañeras inseparables… Y sos la mejor versión de nosotros dos porque no sabemos si es juntos o separados, pero sabemos que somos familia. Y eso no se puede quebrantar. Estamos unidos para un fin común que es tu crianza y para ofrecerte todo para que seas muy muy feliz. Te amo”, cerró, muy cariñosa.