Cacho Garay fue trasladado a una cárcel común en julio del año pasado tras la denuncia de su expareja, Verónica Macías, por violencia de género. En este contexto, se filtró la primera foto del humorista desde su celda, que se mostró al aire en El diario de Mariana, donde aseguraron que el humorista vive en pésimas condiciones.
“Evidentemente, es cierto que bajó de peso, porque se lo ve más delgado, pero también se ven las condiciones en las que vive él y sus compañeros de celda. En la celda hay tres camas y seis personas. Se turnan para dormir en el piso”, aseguró Martín Candalaft.
“Es cierto que bajó de peso, porque se lo ve más delgado, pero también se ven las condiciones en las que vive él y sus compañeros de celda. En la celda hay tres camas y seis personas. Se turnan para dormir en el piso”.
Cacho está preso en San Felipe, en el pabellón A1, que tiene capacidad para 80 personas y en su interior hay 160 reclusos. En la imagen, se lo puede ver fumando, sentado sobre una madera y muchísimo más delgado. Habría bajado más de 20 kilos desde que fue detenido.
EL ABOGADO DE CACHO PIDIÓ QUE VUELVA A PRISIÓN DOMICILIARIA
Mariano Yezze aseguró que el letrado de Cacho le solicitó a la Justicia que su cliente vuelva a prisión domiciliaria.
“El viernes, su abogado presentó un recurso ante la Corte Suprema de Mendoza para volver a la domiciliaria alegando que Cacho tiene cáncer de próstata, diabetes, problemas cardiológicos, neurológicos, motrices y que perdió un 80% de la visión”.
“El viernes, su abogado presentó un recurso ante la Corte Suprema de Mendoza para volver a la domiciliaria alegando que Cacho tiene cáncer de próstata, diabetes, problemas cardiológicos, neurológicos, motrices y que perdió un 80% de la visión. Él quiere que sea evaluado por un oncólogo, un urólogo, cardiólogo, neurólogo y un traumatólogo”, cerró, preciso.