La honestidad de Candela Ruggeri (32) al hablar sobre su experiencia como madre de Vita (1) junto a Nicolás Maccari es absoluta, y por eso no tuvo filtros al explicar por qué no comenzó siquiera a soñar con volver a quedar embarazada.
“Todos me preguntan si queremos vamos a buscar otro hijo, pero no estoy ni pensándolo”, blanqueó la hija del Cabezón Ruggeri en Cortá Por Lozano.
“O sea, yo me crié con muchos hermanos, somos cuatro, nosotros somos un montón. Y me encanta, pero por ahora estoy como encontrándome a mí misma, de estar de vuelta. Quiero viajar un poco con ella, disfrutarla. Y después veré”.
“Aparte mi mamá tuvo mellizos, yo no quiero tener mellizos. Como que ese es mi miedo”. Reveló entre risas.
“Mi mamá tuvo mellizos, yo no quiero tener mellizos. Ese es mi miedo”.
“Yo apenas quedé embarazada, fue como, decime que es uno solo, que no quiero mellizos por ahora. Y me dijo ‘si es uno, quedate tranquila’”, cerró Candela Ruggeri.
CANDELA RUGGERI REFLEXIONÓ SOBRE LA MATERNIDAD
Por otra parte, Cande Ruggeri reflexionó: “Yo siempre digo, últimamente, que la maternidad es como más duro y más hermoso de lo que me imaginaba. Es duro ser madre”.
“Nadie te cuenta. Escuchás cosas. A veces en las películas ves lo que es ser madre, lo que es la maternidad, pero hasta que no lo vivís realmente, no te imaginás tanto sacrificio, ¿no? Lo que es levantarse temprano...”, continuó.
“La maternidad es como más duro y más hermoso de lo que me imaginaba. Es duro ser madre”.
Además, admitió lo que más le costó de la maternidad: “El dormir. No dormí en corrido desde que nació. Nunca. Siempre se levanta a la noche porque toma teta a libre demanda, cuando ella quiere le doy teta y se levanta dos veces por noche. ¡Y a mí me gustaba dormir!”.
“La primera vez que me dijo mamá fue lo más lindo del mundo. Se te va ahí el cansancio, se te va todo como lo malo, entre comillas, que pasás, se te va y decís, es lo más hermoso que me pasó en la vida. Por ahí me preguntan eso. No hay palabras”, celebró orgullosa.
“La primera vez que me dijo mamá fue lo más lindo del mundo. Se te va ahí el cansancio, se te va todo como lo malo, entre comillas, que pasás, se te va y decís, es lo más hermoso que me pasó en la vida”.
Y se deshizo en halagos a su nena: “Es hermosa y es re buena. No llora. Te juro que... Todos me preguntan, ¿y llora mucho? No. Nada. Es extraterrestre. Te juro que me preguntan eso y yo no quiero decirlo para no quemarlo, ¿viste? Claro. Sí. Pero llora nada más ponerle cuando está en la sillita atrás en el auto y la tengo que atar y esas cosas obviamente un poco no le gusta. Pero después es una reina”.