La búsqueda de Fabián Mazzei por convertirse en padre junto a Araceli González lo marcó a fuego toda la vida, y se animó a contar cómo se ilusionó al acompañar a su pareja a un chequeo médico de rutina, luego y se le rompió el corazón por un embarazo que no llegó a término.
“Yo estaba esperándola en el bar de la clínica y de repente veo que se me acerca un médico. ‘Fabián, ¿podrías acompañarme?’, me dijo. ‘¿Ara está bien?’, pregunté. ‘Sí, seguime, por favor’, me pidió. Entonces me condujo hasta la sala en donde estaba ella y cuando la doctora me mostró el monitor… ¡Fue un shock!”, recordó.
“Ahí estaba. Se veía perfecto eso que ellos llaman ‘saquito’”, describió el actor al embrión de cinco semanas.
“A mí se me movió la estantería. No podía creer lo que me estaban contando… ‘¡¿Qué estoy viviendo?!’, me preguntaba a mí mismo. Se ve que la médica leyó mi cara, porque fue muy dulce para explicarme lo que veíamos en la pantalla. íbamos a ser padres…”, continuó en su mano a mano con Teleshow.
Se ve que la médica leyó mi cara, porque fue muy dulce para explicarme lo que veíamos en la pantalla. íbamos a ser padres…”.
“La sensación fue de felicidad. Ara estaba bien, pero muy nerviosa. No sé con exactitud qué transitaba internamente, pero yo sé que me sentí feliz. Era la primera vez que no dudaba en plantar bandera en este país. Me acostaba y me levantaba con esa idea preciosa de tener un hijo”.
EL RELATO DE FABIÁN MAZZEI SOBRE EL EMBARAZO DE ARACELI GONZÁLEZ
Con apenas seis meses de relación, la incertidumbre sobre el futuro de la pareja estaba latente dado que Fabián Mazzei tenía una ascendente carrera internacional, mientras que Araceli González estaba arraigada en la Argentina.
“Fue así que, en medio de ese torbellino de estrés emocional, de tanta angustia, recibimos la noticia y una gran desilusión. Dios quiso que el desarrollo del embrión no prosperase. Pero ese embarazo que nos unió más que nunca, también fue parte de las batallas que elegimos para llegar a donde estamos hoy: el camino correcto. Nunca mejor parados en nuestro propio suelo”, reflexionó.
“Dios quiso que el desarrollo del embrión no prosperase. Pero ese embarazo que nos unió más que nunca, también fue parte de las batallas que elegimos para llegar a donde estamos hoy”.
“Inconscientemente acomodé lo que tocó, sabiendo que llegó sin buscarlo y que así debió ser. Sin darle demasiada vuelta ni pelea al destino. Pero ese mes que vivimos juntos fue muy sanador”, se consoló.
“Al menos hoy puedo decir que esa sensación maravillosa descripta por tantos hombres al momento de saber que serán padres, yo la tuve. Yo la viví. Yo fui papá de un saquito”, cerró Fabián Mazzei enamoradísimo de Araceli González.