Martina Aslan, la abogada de María Fernanda Callejón, renunció a su defensa en la Justicia en medio del tremendo conflicto legal de la actriz con su exesposo y padre de su hija, Ricky Diotto.
“Dejé de ser la abogada de María Fernanda, todo el equipo de trabajo y yo en primera persona lo lamentamos un montón, a veces pasa con los clientes que por actitudes reiteradas que toman con nosotros no nos queda otra opción que renunciar al patrocinio, cuando sentimos que no podemos trabajar no queda otra”, explicó la letrada en diálogo con Juan Etchegoyen en Mitre Live.
“Dejé de ser la abogada de María Fernanda, todo el equipo de trabajo y yo en primera persona lo lamentamos un montón, a veces pasa con los clientes que por actitudes reiteradas que toman con nosotros no nos queda otra opción que renunciar al patrocinio, cuando sentimos que no podemos trabajar no queda otra”.
Además, aclaró que intentó suavizar su vínculo con Callejón para seguir trabajando con ella, pero no lo logró. “No tenemos que olvidarnos de que somos personas y uno como abogada quiere que se resuelvan los conflictos. La Justicia tiene sus tiempos y eso algunos clientes les cuesta comprender, son los tiempos que nosotros desde el estudio no podemos manejar, le avisamos que por sus reiteradas actitudes nos costaba trabajar con ella, le comunicamos esta situación y solo dijo que seamos lo más ágiles posible”, sentenció.
¿POR QUÉ LA LETRADA RENUNCIÓ A LA DEFENSA DE MARÍA FERNANDA CALLEJÓN?
“En lo penal ya renunciamos y el juzgado de garantía nos dio el ok, no quiero entrar en detalles porque es privado, pero lo que sí puedo decir es que en este último tramo noté faltas de respeto y acusaciones que no van, y yo en primera persona lo que siempre digo es que a ella le explicaba todo de una manera que pueda entender, el cliente tiene que entender de qué se trata...”.
“Quiero decir la palabra demandante, pero yo la atendí los feriados, los domingos, sábados, siempre al pie del cañón. Uno a veces por su trabajo espera reconocimiento y respeto, eso no lo encontré del otro lado. Como esto siempre siguió decidimos renunciar al patrocinio, hasta acá llegamos; no sé si me sentí maltratada, pero hubo abuso de confianza, no puse límites”, sentenció, indignada. ¿Qué dirá María Fernanda?