El querido crítico de moda Mariano Caprarola falleció a los 49 años tras haber sufrido una descompensación. En medio de la tristeza por su fallecimiento, aseguran que guardaba información clasificada de Aníbal Lotocki, el médico que lo operó en 2010.
Es importante remarcar que Lotocki le retocó los glúteos con la misma técnica que le aplicó a Silvina Luna un año después, por lo que Caprarola también desarrolló una insuficiencia renal. Por eso, cada vez más seguido debían intervenirlo para sacarle las piedras que se le formaban en los riñones.
“Él dijo que si le pasaba algo, en la caja fuerte de su casa dejó el nombre de esta persona. Que en caso de morir, que vayan a la caja fuerte, que ahí está el nombre”.
En este contexto, Ángel de Brito habló de la “protección política” con la que contaría Aníbal. “Tengo un mensaje de él del 29 de junio, de un día que estábamos hablando acá de Silvina Luna, y él me hablaba de la protección política que tenía Lotocki… De cumpleaños... Y en esos cumpleaños había un político muy importante. Me dijo, textual: ‘Si lo cuento públicamente me matan y termino en un cajón’. Vivía con ese miedo también”, contó el conductor.
Acto seguido, Yanina Latore aportó un fuerte dato en LAM. “Él dijo que si le pasaba algo, en la caja fuerte de su casa dejó el nombre de esta persona. Que en caso de morir, que vayan a la caja fuerte, que ahí está el nombre”, cerró.
MARIANO CAPRAROLA HABLÓ DE LA MALA PRAXIS QUE SUFRIÓ
“Tuve una mala praxis por parte de un médico al que le hice juicio y que ni nombro. Es de público conocimiento que ha castigado muchas vidas, como la de Silvina Luna. La nombro porque ella lo ha hecho público. Ella está siempre con un reloj a punto de la explosión por una sustancia que le colocó este médico en su cuerpo”, había contado.
“Tuve una mala praxis por parte de un médico al que le hice juicio y que ni nombro. Es de público conocimiento que ha castigado muchas vidas, como la de Silvina Luna. La nombro porque ella lo ha hecho público. Ella está siempre con un reloj a punto de la explosión por una sustancia que le colocó este médico en su cuerpo”.
Y aunque lograron extraerle lo que Lotocki le había inyectado, había contado que sufrió muchísimo. “Ya no está en mi cuerpo, ya no convivo con eso, es una película de terror que viví”, había dicho.