La vida le dio un duro golpe a Dolores Cahen D’Anvers (44), quien el 23 de septiembre pasado sufrió la pérdida de su marido, Horacio Mazza, luego de que el hombre de 47 años sufriera un ataque al corazón mientras jugaba un partido de fútbol con sus amigos.
Pese al dolor, a los cinco días de su pérdida, la periodista retomó sus responsabilidades laborales con la conducción de Red de Salud, el ciclo mañanero que encabeza en la TV Pública.
"Cuando voy a visitar a la tumba de Horacio, le hablo y lloro todo lo que no puedo en casa. Lo uso como mi lugar de terapia. Allí puedo contarle y decirle todo lo que nos pasa a los chicos y a mí”, expresó con dolor, Dolores Cahen D'Anvers.
Lo hizo con el objetivo de desmostrarle a sus hijos que había que salir a flote. Pero no fue fácil para la mujer que compartió 21 años junto a su gran amor: “Estoy intentando entender y aceptar que no va a entrar más por esa puerta. Eso es lo más doloroso. No tengo palabras para describir cómo fue el momento en que les dije a mis 3 hijos (Simón, de 15; y los mellizos Isidro y Rufino, de 12) que su papá había muerto. Es lo peor que te puede pasar en la vida... es desgarrador. Yo no sabía cómo separarme en tres pedazos para poder contenerlos. A partir de entonces comenzó la sobrevida de todos”, contó la conductora, entre lágrimas, a la revista .
“Es triste, dolorosa, alienante... ¡Los primeros meses fueron bravísimos! Asumir la responsabilidad que se me venía encima fue tremendo. Intento sostener a los chicos todo el tiempo, y señalarles un camino que ni yo misma sé cómo es”, agregó Cahen D'Anvers.
Por otro lado, Dolores dio detalles de los momentos que aprovecha para poder desahogarse tranquila: "Cuando lo voy a visitar a su tumba, le hablo y lloro todo lo que no puedo en casa. Lo uso como mi lugar de terapia. Allí puedo contarle y decirle todo lo que nos pasa a los chicos y a mí".
Por último, la sobrina de Mónica Cahen D’Anvers se mostró muy positiva con respecto a su futuro: "Creo en la vida y soy muy optimista, sin que esto signifique olvidar. Yo soy esta mujer porque viví la mitad de mi vida con Horacio. Siento que él me hizo mejorar como ser humano. Nosotros nos vamos a reconstruir como familia, porque tenemos amigos que son como hermanos y dos familias valiosísimas que nos acompañan. Hoy somos cuatro sobrevivientes".