En River jugó sólo cinco partidos. Era visto de costado porque hacía terapia y sus compañeros comentaban por lo bajo '¿viste?, parece que el Ruso está loco'.
El inicio de la segunda temporada de MasterChef conlleva que los espectadores ya vayan definiendo a sus favoritos, al igual que el jurado.
Distintas personalidades, perfiles e, incluso, ojos culinarios, ya se empezaron a vislumbrar. Dentro de los 20 finalistas elegidos en la primera emisión, hubo uno que llamó la atención por su historia personal (y también por hacer un rico sandwich de milanesa, luego de un lomo con crema y panceta).
Es que Sebastián Ablín (42), además de ser un flamante participante del reality de Telefe, fue futbolista profesional, llegó a la Primera de River y también incursionó en la música en Los Chakales y Arbolito. Ahora, además de cocinero amateur, es parte del grupo de percusión El Choque Urbano.
Aquí, con la afamada banda tropical:
Estanislao Balder contó la historia de Sebastián en el blog EnUnaBaldosa.com: "Jugaba de lateral derecho y debutó con la camiseta de River en 1991, en el torneo de verano de Mar del Plata. Los memoriosos recordarán la edición de una conocida revista deportiva (ahora mensual) donde aparecían abrazados varios jugadores de River luego de un partido ante Racing. Entre ellos, aparecía la figura sonriente del joven Ablín con una venda en una de sus cejas. En River jugó sólo cinco partidos y de a poco fue cediendo terreno por cuestiones anímicas. En un entrenamiento, Hernán Díaz, temiendo que el perseverante Ablín le quitara el puesto, le propinó un terrible codazo que lo dejó sin aire mientras lo increpaba al grito de 'Pará de correr, pendejo'". Según rememora el episodio el propio Ablín: "Si fuera hoy, en la jugada siguiente voy y lo parto. Pero en ese momento me quedé helado".
Tocó en varias bandas de rock (entre ellas Arbolito) y luego pasó a la cumbia (tentado por el dinero) donde conoció el efímero éxito del grupo Los Chakales. Hasta que en 2002 formó la compañía musical El Choque Urbano.
Y continúa la crónica Balder: "También era visto de costado porque hacía terapia y sus compañeros comentaban por lo bajo '¿viste?, parece que el Ruso está loco'. Estando en River se lesionó, dejó el club y más tarde probó otros horizontes. En 1997 representó a la Argentina en las Olimpíadas Macabeas en Israel y luego despuntó el vicio en Defensa y Justicia, donde terminó su carrera. El mismo Ablín confesó más tarde que no soportaba el ambiente de la cancha y del vestuario".
Entonces, Ablín probó con el arte: "Luego de abandonar el fútbol, vio un futuro posible en la música y se dedicó a la percusión. Tocó en varias bandas de rock (entre ellas Arbolito) y luego pasó a la cumbia (sin duda, tentado por el dinero) donde conoció el efímero éxito del grupo Los Chakales, aquel que cantaba 'Vete de aquí, vete de mi ladoo-oo'. Hasta que, en 2002, formó junto a sus hermanos la compañía musical El Choque Urbano, banda que en sus más de 10 años de existencia revolucionó el género en el país y se proyectó a todo el mundo", contó Balder. Y hay video...
¿Tendrá la misma suerte en MasterChef?