El amor los unió. Y la temporada teatral, los separó. La distancia kilométrica y los rumores de "terceros en discordia" suscitados este verano hicieron que Matías Alé y Sabrina Ravelli afronten una fuerte crisis, que concluyó con la disolución de la pareja.
Marzo los encuentra cada uno por su lado. Él se fue a Miami de vacaciones con amigos; ella, tras bajarse de las giras de Tu cola me suena, se quedó en Buenos Aires para reorganizar su vida.
Dolida, conteniendo el llanto, Sabrina habló de su situación actual con Matías, quien no sólo canceló el casamiento sino que le pidió estar solo. "Fue un verano bastante fuerte. Todos empezaron a hacerme tiro al blanco, todos empezaron a hablar mal de mí y terminé devastada. Igual esa fue la parte mediática, y eso no fue lo que me destrozó, porque sabía que era mentira. A mí, lo que me destrozó fue la situación con Matías", pronunció, angustiada, en Desayuno Americano.
"Él tomó la decisión de separarnos. Antes de los líos mediáticos, Matías decide estar solo porque estaba atravesando una crisis".
Sobre el motivo que le dio Alé para ponerle punto final a su noviazgo, detalló: "Él tomó la decisión de separarnos. Antes de los líos mediáticos, Matías decide estar solo porque está atravesando una crisis que, según él, le pasa aún antes de conocerme, y es una crisis que quiere tratar. Y yo pago el pato de todo esto, porque yo siento que una pareja está en las buenas y en las malas; y cuando uno atraviesa un momento difícil tratás de compartirlo con la persona que amás y te aferrás a tu gente más querida", manifestó, sin entender el accionar de Alé, a quien asegura ya no conocerlo.
Antes de iniciar la temporada, la pareja ya había afrontado una pequeña crisis que condujo a la postergación de la boda. Y, nuevamente, Matías la anotició de sus dudas a la distancia: "El casamiento se suspende cuando él se fue al Mundial. Me cuenta a través de webcam que estaba atravesando una crisis, y suspende la fecha".
Un amor que encontró punto final.