Parecían una pareja enamorada que iba a pasar el resto de sus días juntos, pero después de siete años de amor, llegó el casamiento y, a los pocos meses, la disolución del vínculo. En 2009, Gerardo Sofovich (77) y Sofía Oleksak (39) se casaron y, en 2010, se divorciaron.
De esa forma parecía concluir su historia de amor, pero decidieron darse una nueva oportunidad. Oportunidad que duró un suspiro y causó un ida y vuelta mediático con fuertes declaraciones.
Tras la muerte de Gerardo: "Perdón, pero ahora no voy a hablar. Estoy muy triste", dijo Oleksak.
Cada uno por su lado, dispararon con munición gruesa. En una nota televisiva, Sofovich había dicho: "Ella volvió conmigo porque no tenía un mango. Dicen que no es bueno que el hombre esté solo, pero también que es mejor estar solo que mal acompañado. El domingo, gastó 75 mil pesos. Una locura", declaraba, logrando una furiosa respuesta de su ex.
"¿Si me arrepiento de haber vuelto con él? Directamente me arrepiento de haberlo conocido. No tengo ganas de entrar en todo este juego. Qué hable él, que le encanta", declaraba furiosa, para luego rotularlo como "una planta".
Decidido a no mirar atrás y a dar vuelta la página, Gerardo sentenciaba: "Me saqué una mochila pesada de encima, de muchos años (...) Lo tomo como una metáfora a lo de la planta. Ya a ella la sigo considerando como una bella flor, lástima que está llena de espinas. Conviene más mirarla que tocarla, porque pincha", decía.
Pero esta mañana de domingo, el conductor y empresario teatral encontró la muerte, tras sufrir un shock hipovolémico, en la Clínica Suizo Argentina.
Ciudad.com se comunicó con Sofía Oleksak para saber cómo había repercutido en ella la partida de Gerardo y, lejos del enojo con el que se refirió a su ex en las últimas charlas con la prensa, señaló: "Perdón, pero ahora no voy a hablar. Estoy muy triste", demostrando que, más allá de la guerra que vivieron el último tiempo, en su corazón quedaban sentimientos nobles hacia Sofovich.