La conductora de televisión encontró una segunda pasión: hacer yoga. Verónica Varano (48), dueña de una figura impecable, armoniza su cuerpo con dicha disciplina física y mental, de la que, hace siete meses, se recibió de profesora.
"Estoy feliz, para mí esto es el comienzo de un nuevo camino".
"Estoy feliz, para mí esto es el comienzo de un nuevo camino", dijo la bella morocha en la revista ¡ Argentina, semanario para el que posó en las playas de Pinamar con la mar de fondo y concentrada mientras ejercitaba sus posturas.
Vestida totalmente de blanco, Verónica desplegó su cuerpo en una manta del mismo color y habló de su amor por la disciplina. "No recuerdo cómo empecé, pero sé que enseguida me adherí a la filosofía del yogui: la no violencia, la conmiseración, el ponerse en el lugar del otro y tratar de ver siempre el lado positivo de las cosas", aseguró Varano, feliz con su nueva decisión espiritual.
Mente sana, cuerpo sano.