"Fue una tarde brava, la vi muy expuesta a Sabri, vi que le inventaban romances y sabía que iba a pasar", dijo Matías.
El escándalo explotó en televisión y el enojo fue indisimulable. Al día siguiente de su televisada separación, Matías Alé y Sabrina Ravelli volvieron a enfrentar la cámara de Desayuno Americano y contaron cómo vivieron sus horas luego del picante cruce que protagonizaron.
Primero, fue el turno del galán. “Ayer fue una noche en la que hice un balance y llegué a la conclusión de que uno aprende un montón de cosas. Tuvimos una charla muy linda, quizá a destiempo, fue un error mío no haberla tenido antes. Tal vez entendí mal cuando me dijo que no tenía más ganas de hablar. Esto pasó hace cuatro días y hablamos recién ayer, antes nos comunicábamos por mensajes de texto. Fue una charla muy sana, componedora, de dos personas que sienten mucho amor y están transitando una crisis. Fue una tarde brava, la vi muy expuesta a Sabri, vi que le inventaban romances y sabía que iba a pasar. Nunca es importante que una pareja se separe, siempre tiene que haber factores externos y acá no los hay”, dijo Matías, desde Villa Carlos Paz.
"Tal vez mi actitud fue un poco fuerte, fui transparente. Me saqué a la mañana, esa es la verdad. Estaba enojada, estaba dolida", comentó Ravelli.
Luego, la bella morocha tomó el micrófono y se mostró arrepentida por la bulliciosa pelea del día anterior. “Me chocó volver a ver una repetición, tal vez mi actitud fue un poco fuerte, fui transparente. Me saqué a la mañana, esa es la verdad. Estaba enojada, estaba dolida. Hablé muy sacada, escucharlo a Mati hablar por primera vez delante de una cámara me dolió. Hoy estoy más tranquila, ya hemos hablado. Venimos manteniendo una conversación. Tanto Mati como yo nos amamos de verdad, hay mucho amor, no hubo conflictos con terceros, somos muy unidos y compañeros. Acá hubo una crisis que surge de la distancia y es difícil llevar tres meses separados”, aseguró Sabrina, desde las playas de Mar del Plata.