Nunca tuvo pelos en la lengua y ésa es una de las tantas virtudes naturales de María Eugenia Ritó, quien en un acto consciente de sincericidio, le pasó una factura al productor teatral Javier Faroni. La actriz y vedette se quejó con ironía de la "desventajosa" modalidad de contratación bajo la cual integra el elenco de Tu cola me suena, obra que comparte la sala del Provincial de Mar del Plata con Regatos salvajes.
"Estamos acostumbrados a hacer dos funciones, y como estamos acostumbrados a cobrar a porcentaje… Me van a matar los productores, pero yo soy muy sincera y no me callo nada la boca. Si no hubiera otra obra, estaríamos haciendo dos funciones de martes a domingos, entonces cobraríamos mucho más".
Lo que desató el descontento de Ritó fue que su compañera Andrea Estévez explicó que Faroni programó una función a las 21 y otra a las 23 horas, y que cada obra se turnaría una semana cada una en dichos horarios. "A la hora de ir a cobrar, es una cagada. Porque estamos acostumbrados a hacer dos funciones, y como estamos acostumbrados a cobrar a porcentaje… Me van a matar los productores, pero yo soy muy sincera y no me callo nada la boca. Si no hubiera otra obra, estaríamos haciendo dos funciones de martes a domingos, entonces cobraríamos mucho más", disparó la exesposa de Marcelo Salinas.
Alejandro Fantino tomó nota de la crítica de María Eugenia y la respaldó. Sin embargo, el conductor de Animales Sueltos se asombró y relamió cuando descubrió que en realidad se trataba de una forma de Faroni para dar trabajo a dos elencos completos, a la vez de hacerlos competir en la taquilla hasta que sólo una logre convertirse en su obra mimada. "Al productor le da lo mismo porque va a cobrar por las dos obras, se le van a llenar las salas igual. Para nosotros, no…".
Para distender el clima y rebatir a Federico Bal, quien salió en defensa del empresario, Ritó blanqueó otro problema: "El tema es que todos ellos tienen otros curros, ¡y yo no!". Claro que se trata del teatro Provincial, con capacidad para 800 espectadores y uno de los de mayor capacidad en La Feliz.
"Yo necesito un trabajo más, ¡o un novio con plata! Así nomás lo digo. Quiero un novio con plata".
En su segunda arremetida, María Eugenia Ritó apuntó contra el horario de la primera función: "Hay una realidad, la gente va a la playa y cuando hay sol, se quiere quedar tomando el matecito con las facturitas hasta las 8 o 9 de la noche (…) Yo necesito un trabajo más, ¡o un novio con plata! Así nomás lo digo. Quiero un novio con plata".
¿Aparecerá un galán afortunado para conquistar y mantener feliz a Ritó?