Anita Martínez y El Bicho Gómez llegaron casi de casualidad al Bailando. El verano pasado se buscaban figuras para el show y, cuando se estaban puliendo las listas, los productores notaron que les faltaban humoristas. Si bien estaban contratados Freddy Villarreal y Fátima Florez, y estaban charlados otros tantos integrantes del ciclo, al tiempo que se especulaba con el debut actoral de Pedro Alfonso (imitando a Amado Boudou), fueron por más.
Las dos claves del éxito de Anita y el Bicho en el Bailando son el humor (con sus bulliciosas previas) y el sueño: la actriz, que se dedica al proteccionismo animal, supo transmitirlo como nadie en el certamen.
Alguien recomendó a Anita Martínez y Laura Oliva. Y así fue que empezó esta historia. Finalmente, se concretó la dupla con Marcos “El Bicho” Gómez, y no había muchos que arriesgaran una final con esta dupla.
Durante el año vivieron distintos momentos, pero uno se destaca por sobre todos: el día que explotó su previa. Y esa fue una de las claves para este triunfo: el humor.
Las dosis cómicas, que muchas veces se extendieron durante casi todo el programa, los consagraron. Incluso, superando a muchos actores que pasaron por el ciclo. Algo pasó entre ellos que los convirtió en protagonistas; quizás fue la gran química que este dúo mostró, al conocerse de muchos trabajos teatrales anteriores.
Hay que decirlo: el de Piquín es un caso bastante particular, ya que ha convivido con miles de polémicas y jamés le afectaron. Imputaciones como "ñoqui", un ex que lo acusaba de violento, peleas con la prensa, y muchas cosas más. Nada de todo esto lo afectó jamás. Su carisma y talento terminan salvándolo.
El caso de Figaredo es la gran sorpresa del Bailando. No solo fue la mejor de este ciclo, sino además la mejor de la historia de este programa. Ojalá el 2015 la encuentre como titular. Virtuosisimo, humildad y una sonrisa única. Sólo aplausos para ella.