Cual experto alquimista, Santiago del Moro logró transformar un programa pensado para tapar un bache en oro en polvo para América, y este viernes por la tarde se emocionó al anunciar su despedida. Muy cauto y preciso en su confesión para mantener en vilo a la audiencia, apenas el conductor dio pistas respecto de su decisión, Marina Calabró comenzó a largar las primeras lágrimas.
En plena alocución, Del Moro rompió el halo de misterio para bromear con su compinche: "¡La caradura ya llora! Calabró llora. Preparen los pañuelos. Todavía no dije nada". Incómoda, Marina se justificó: "Es emoción, revolución, movilización de sentimientos. No es tristeza, es felicidad. Es agridulce...".
La definición crucial del conductor fue ambigua: "Este programa, con este equipo, está llegando a su fin. Digo esto porque Marina se va a Intrusos, yo voy a continuar en el canal en Intratables. Por el momento mi retiro voluntario de Infama va a ser por el verano… Es como si me fuera de mi casa hoy, porque es el programa que me dio todo, el que me permitió lograr absolutamente todo en esta carrera. Es un programa que podría seguir haciendo el resto de mi vida".
Con lo cual, viernes 19 de diciembre será la despedida de Santiago del Moro, tras 6 años y 4 meses al aire (arrancó el 18 de agosto de 2008). Y el lunes 22 va a ser reemplazado por Rodrigo Lussich, según confirmó Ciudad.com.