Luego de que Santiago del Moro calificara a Marina Calabró y a Marcela Feudale como sus "hermanas del aire" -porque trabajan con él en Infama y las quiere como parte de su familia-, llegó una inesperada fricción entre él y la panelista.
"Papi, ¿por qué? Mamá se pone triste porque besaste a tu amiga y ¡no la tenías que besar!", dijo Catalina.
El jueves pasado Feudale le reclamó al aire a Santiago: "No me dejás hablar, estoy censurada". Y él le respondió: "Sabés qué enana, andate, por favor. Hoy estás insoportable". Acto siguiente se levantó y se fue.
Pero el enojo duro lo que dura un tape televisivo. Rápidamente se pidieron disculpas y sellaron su reconciliación con un beso en la boca… Sin saber que ese gesto le traería un tierno reclamo familiar al conductor.
Del otro lado de la pantalla estaba su hija Catalina (4), quien no dudó en hacerle un reclamo a su padre.
La situación le causó gracia a Del Moro y decidió grabarla y compartirla con sus compañeros y su público de Infama. "Yo soy un tipo comprometido pero tuve un cuestionamiento de mi hijita", adelantó, para darle play al mensaje de voz de Catalina: "Papi, ¿por qué? Mamá se pone triste porque besaste a tu amiga y ¡no la tenías que besar!".
"¿Se lo podés mandar a Mirtha Legrand y a Lizy? Saben que papá le dio un beso a una amiga y eso no se hace. A mamá le cayó mal", agregó la pequeña.
Tan sólo unos días atrás, la hija mayor de Santiago tomó protagonismo en los medios por expresarle su amor a Mirtha Legrand y, dada su admiración con la diva, le pareció atinado que ella también "le ponga los puntos a su papá".
"¿Se lo podés mandar a Mirtha Legrand y a Lizy Tagliani? Saben que papá le dio un beso a una amiga y eso no se hace. A mamá le cayó mal", agregó la pequeña.
Tras oír los reclamos de su hija y con una muestra inevitable de orgullo, el conductor agregó: "Estuve hasta altas horas de la noche explicándole que fue un chiste".
Por su parte, Feudale también señaló: "Dejame que le pida disculpas. 'Cata, mi amor, era un jueguito, no te pongas mal'... ", cerrando la tierna situación familiar que vivió Del Moro.