Lejos de la alegría y la explosión de energía que transmite con su música, la cantante Katy Perry se tomó unos minutos para hablar de la oscura etapa que vivió tras su divorcio de Russell Brand -a fines de 2011- que la llevó a pensar, por momentos, en el suicidio.
El matrimonio duró apenas 14 meses, y fue el comediante inglés quien solicitó la disolución en Los Ángeles; finalmente el divorcio se logró en 2012, luego de que Brand cediera a Perry la parte de lo que le correspondía de la casa que habitaron juntos.
En una entrevista para el programa australiano The Project, la intérprete habló de su profunda tristeza por la ruptura."Fue muy triste y había pensamientos oscuros, pero nunca acciones, afortunadamente", dijo la intérprete en relación con las ideas suicidas.
También comentó que la canción By The Grace of God fue la primera que escribió para su más reciente disco, en donde describe su separación. "Siempre sientes que eres la única que pasa por eso. Bueno, entonces viene esta canción que te habla, que te hace sentir como 'Dios, puedo salir de esto. Si ella puede, yo puedo'", resumió.