"Me la levanté para sacarle información, nos conocimos en un solarium. Durante un mes la estuve laburando, la llevé a casa y ahí la grabé".
El lunes 23 de diciembre de 2013, Luis Ventura anunció en Intrusos que había comprado un escandaloso video hot que supuestamente protagonizaba Ayelén Paleo junto a otra mujer y un hombre. “Les voy a decir lo que pagué el video… ¡40 mil pesos! Es el más caro que he comprado”, detalló el periodista. Días después, en el ciclo de América mostraron las primeras imágenes de la filmación, aunque por decoro decidieron distorsionarlas y sólo se escuchaba el audio.
La propia vedette terminó reconociendo ser la de la mujer que hablaba en las grabaciones sobre el comentado romance con Santiago Bal. “Sí, la del audio soy yo, lo acepto, pero no dije nada que no haya dicho desde el día uno. Ese audio no salió de mi voluntad, lo han grabado sin que me dé cuenta, no es que yo me filmé”, aclaró Paleo.
"Yo lo que quería era lograr información sobre Santiago Bal y después pensaba venderla. Si ella llegaba a decirme que había estado con él, valía una fortuna".
El tiempo pasó y el escándalo se olvidó… hasta hace unos días. En las redes sociales comenzaron a circular capturas del video hot, publicadas en la cuenta de Twitter @altoescandalo y la polémica estalló. El Diario de Mariana convocó a Miguel Rizzo (47), un detective privado que ha realizado numerosas investigaciones y cámaras ocultas a famosos, entre ellas a Mariana Nannis.
Presentado como “el topo de la farándula”, el ex policía reveló detalles de la grabación y terminó reconociendo ser el protagonista del video hot. “Yo lo que quería era lograr información sobre Santiago Bal, era lo único importante”, aseguró. Ángel de Brito le consultó cómo había iniciado su relación con Paleo. “Nos conocimos en un solarium, yo tenía un solarium que vendí hace poquito. Entramos a tener contacto y me la levanté para sacarle información. Como no me conocía, me venía como anillo al dedo. Durante un mes la estuve laburando, la llevé a casa y ahí la grabé”, aseguró sin titubear.
Los panelistas del ciclo cuestionaron la forma de obtener la información y la exposición íntima sin autorización, aunque el hombre se desligó de la publicación del video. “Esa investigación fue por iniciativa propia y después pensaba vender la información. Necesitaba de alguna manera demostrar si Ayelén había estado o no con Bal. Ella no tenía por qué negarme nada en esa situación, no daba para que me mienta. Buscaba información, era una noticia que buscaba todo el mundo. Si ella llegaba a decirme que había estado con él, valía una fortuna. Pero no sé de dónde sacaron estas imágenes”, concluyó Rizzo.
Cuidado famosos, hay un espía suelto.