"Ahora estoy solo. Me gusta salir a bares tranquilos, pedir un Bloody Mary. Pero no salgo demasiado seguido y mucho menos todos los fines de semana".
En un elenco tan multifacético y talentoso como el de Viudas e Hijos del Rock & Roll, Juan Sorini logró destacarse. Su personaje de Tony, el petisero del que se enamora Juan Minujín en la ficción, despierta ternura en el público… e interminables suspiros.
A sus 31 años, el actor rosarino cuenta con un imperdible historial de actividades: durante 18 años jugó en la primera división de rugby en el Jockey Club de Rosario, estudió kinesiología y profesorado de educación física pero no terminó ninguna de las carreras ya que dejó todo para dedicarse a la actuación.
Antes de poder trabajar de lo que realmente le gusta, fue a un casting de una publicidad y lo vio el reconocido fotógrafo internacional Bruce Weber. En una extensa entrevista con revista Pronto, Juan contó sobre la experiencia: “Quedé seleccionado y, ya estando en el rodaje, me dijo que podía ser modelo, que no renegara de eso. Me metió fichas. También me decía que yo parecía todo el tiempo muy preocupado y triste. Y tenía razón. Me hizo muchas fotos en esos cuatro días en los que trabajamos juntos y empecé, no sé con qué fuerzas, a tramitar la visa”.
El futuro le deparaba una exitosa carrera como modelo: “A la semana me escribió un mail para viajar a hacer Vogue París. A partir de ahí, se me abrieron algunas puertas, viví en Miami y en España durante dos meses, dejé mis datos en varias productoras e hice teatro independiente”.
"Me piropean hombres y mujeres, por igual. Pero siempre con respeto. Me dicen que les gusta lo que hago, que se ve cierta ternura e ingenuidad en mi personaje, a pesar de la tensión sexual".
La gran oportunidad en la actuación le llegó de la mano de Antonio Gasalla, quien lo convocó para formar parte del elenco de Más respeto que soy tu madre. En Viudas e Hijos del Rock & Roll, Sorini se enfrenta a un nuevo desafío, al protagonizar una entrañable historia de amor con Segundo, interpretado por Juan Minujín.
“Me piropean hombres y mujeres, por igual. Pero siempre con respeto. Me dicen que les gusta lo que hago, que se ve cierta ternura e ingenuidad en mi personaje, a pesar de la tensión sexual. Esta es la primera vez que tengo que tener un acercamiento con un hombre y también es mi primera intervención en una gran ficción, con un personaje con historia y continuidad”, le dijo a Pronto.
Además, contó qué le gusta hacer en sus ratos libres: "Salgo a correr cuatro veces por semana, siete kilómetros por vez. Y me gusta leer mucho sobre los '70 en nuestro país, sobre el surgimiento de las organizaciones armadas, y también la revolución libertadora".
¿Su estado sentimental? Solterito y sin apuro. “Ahora estoy solo. Me gusta salir a bares tranquilos, pedir un Bloody Mary. Pero no salgo demasiado seguido y mucho menos todos los fines de semana”. Chicas, ¡a estar atentas!