Alberto Ferriols, el ex marido de Beatriz Salomón, asistió a AM, programa en el que habló de la situación actual con sus hijas, Betina (10) y Noelia (13), a quienes no ve hace más de un año.
"El último grado de lavado de cerebro es este, ya las nenas no quieren verme. No me dieron una razón, yo no las voy a obligar"
Luego del escándalo provocado en 2004 por la emisión de la cámara oculta de Punto Doc, donde lo grabaron en una situación irregular junto a una joven travesti, la relación de pareja con Salomón se quebró, cortando también el contacto con sus hijas hasta hacerlo casi inexistente. Hoy, Alberto lucha ante la Justicia para restablecer el vínculo.
"El último grado de lavado de cerebro es este, ya las nenas no quieren verme. No me dieron una razón, yo no las voy a obligar (...) Siempre estoy amenazado por el escándalo público. Lo que sí quise dejar sentado ante la Justicia, para el día que yo no esté, es que hice una demanda de impedimento de contacto, denuncias y que hay un régimen de visitas, pero no se cumple. A la Justicia no le interesa esto temas, yo vengo a pedir clemencia, vengo a pedir ver a mis nenas. No se dan cuenta que le están haciendo mucho daño a los chicos", argumentó Ferriols.
"Que no me las dejen ver es una crueldad. La única que puede cambiar esto es la madre que no tiene ninguna intención de cambiarlo. Ella me dice: ‘Yo hice Justicia’"
Visiblemente dolido, el médico cirujano explayó que su presente viene asociado a un acto de "venganza" de Beatriz y que si ella no cambia de postura le será imposible recuperar el afecto de Betina y Noelia.
"Que no me las dejen ver es una crueldad. Yo quiero verlas, salir, poder hacer un viaje, comprarles ropa, ir a almorzar, cenar. No voy a irrumpir en un colegio. La única que puede cambiar esto es la madre que no tiene ninguna intención de cambiarlo. Ella me dice: ‘Yo hice Justicia’", finalizó.
Panorama doloroso y complicado, ¿qué responderá Salomón?