"Muy pronto", como suelen anunciar los canales de televisión, una nueva ficción de Sebastián Ortega y su productora Underground comenzará por Telefe. Viudas e Hijos del Rock & Roll tendrá un elencazo -a partir del lunes 18 de agosto a las 21.15- compuesto por Paola Barrientos, Damián de Santo, Celeste Cid, Julieta Ortega y Ludovico Di Santo, quien charló con Ciudad.com sobre este nuevo desafío.
"Me organizo un poco como puedo con las grabaciones y teniendo un hijo chiquito. Cuando puedo lo llevo al jardín, cuando no puedo, no. Ahora tendremos que ver quién va a buscar a Filipo al jardín y esas cosas. Pero bueno, el carro anda y los melones se acomodan solos... Todo es prueba y error".
El galán, que no trabajaba hace un año porque se fracturó la tibia y el peroné al caer de un morro en Brasil mientras protagonizaba una sesión de fotos publicitarias, será uno de los malos de la historia.
Cómo será su personaje, cómo transita la vida en familia con su hijo de dos años, y más.
-¿Cómo te preparás para el debut de Viudas e Hijos?
-Estoy contento, tengo expectativa, estoy divirtiéndome, haciendo comedia, conociendo mucha gente con la gente que no había laburado. ¡Creo que va a ser una bomba!
-¡Guau! ¿Por qué estás tan seguro?
-Por los actores, la historia, las escenas que fui viendo... ¡Va a estar buenísimo!
-¿Cómo es tu personaje, Nacho Aróstegui?
-Viene de una familia rica, es de la parte de los "malos". Tiene un hermano mayor al que envidia y desprecia que es Juan Minujín, está casado con Violeta Urtizberea. Es bastante inescrupuloso y ahí estamos, con Luis Machín como mi padre y Verónica Llinás como mi madre. Dos grandes.
-Nuevamente vas a hacer de malo como en Sos mi hombre...
-Je. Esta vez no seré tan malo como aquel Diego Jáuregui, que era perverso. Al ser una comedia, es todo más light. Es la primera vez que hago comedia y me gusta mucho.
-¿Cómo te llevás con Violeta Urtizberea, tu mujer en la ficción?
-Es lo más, me estoy muriendo de risa, es muy graciosa. Es de otra de las que aprendo, porque es una muy buena comediante.
"Estoy un poco con ansiedad por San Lorenzo en la final de la Libertadores, sin querer decir demasiado porque estamos tan cerquita del sueño y por jugar el partido más importante de nuestras vidas. Estamos a un pasito. Seguramente iré a la cancha y no me hagas decir nada más del tema, ja, ja".
-Hablando un poco de la realidad. ¿Cómo te organizás para grabar tantas horas teniendo un hijo tan chiquito (Filipo, de 2 años, fruto de su pareja con Jimena, su mujer)?
-Me organizo un poco como puedo, cuando puedo lo llevo al jardín, cuando no puedo, no. Cuando se puede, se hace, y cuando no, se resolverá de otra forma. Pero es todo un tema, sí. Estuve un año sin laburar porque me quebré bajando de un morro en una campaña de fotos, entonces estaba acostumbrado a estar más en casa. Ahora tendremos que ver quién va a buscar a Filipo al jardín y esas cosas. Pero bueno, el carro anda y los melones se acomodan solos... Todo es prueba y error, más teniendo en cuenta que Filipo es nuestro primer hijo.
-¿Cómo manejás tu manía con el orden teniendo un bebé, con todo lo que eso implica?
-Ja, ja. Con la experiencia de la convivencia con mi hermano menor, hace ya algunos años, en la que sí soy maniático del orden -él lo es pero del desorden y con un hijo-, estoy casi curado.
-Sé que te encanta leer y sos seguidor de por sus historias relacionadas con el fútbol, ¿estás ahora con algún libro?
-¡Sabés que ahora no! Cuando empiezo a grabar, no leo nada, no sé por qué... Solamente los libretos, je. Me regalaron dos libros de Eduardo Sacheri: Esperando a Tito y Papeles en el viento. Soy muy futbolero y me enloqueció.
-Hablando de fútbol, debés estar súper ansioso por ver la definición de la Copa Libertadores con tu querido San Lorenzo por primera vez en la final...
-Estoy un poco con la ansiedad, sin querer decir demasiado porque estamos tan cerquita del sueño y por jugar el partido más importante de nuestras vidas. Estamos a un pasito. Mi tío me hizo de San Lorenzo y soy bastante fanático, así que estamos en una semana fundamental. Seguramente iré a la cancha y no me hagas decir nada más del tema, ja, ja.