"Tanto Mauro como Wanda tienen razón en enojarse. Vinieron a felicitarme y pensé que estaba confirmado".
Andrés Nara se convirtió en el protagonista involuntario de un escándalo familiar. El padre de Wanda Nara confirmó el embarazo de su hija y Mauro Icardi y ardió Troya. La joven y el futbolista salieron con los tapones de punta en Twitter por la indiscreción.
“La gente que habla de la vida de los demás y encima sin conocerla sin saber nada... ¿Por qué es? ¿Será que no tienen vida o de qué hablar?”, escribió la botinera, mientras que el delantero se mostró mucho más picante. "No entiendo cómo una persona que hace dos meses no habla con nosotros confirma tantas noticias", comentó.
Para evitar una escalada en el conflicto familiar, Andrés decidió salir públicamente a disculparse. Arrepentido por sus declaraciones, explicó lo sucedido. “Se armó un lío con eso porque la verdad que, tanto Mauro como Wanda, tienen razón. Vinieron a felicitarme y pensé que estaba confirmado”, explicó en el living de AM.
"No le gustó a Wanda. Quedé desubicado, me adelanté así que pido disculpas".
“Claro, después me entero que no se había hecho los chequeos, faltaba el control con el médico y bueno, medio que no le gustó. Quedé desubicado. No le gustó que haya confirmado algo que realmente no estaba confirmado. Me adelanté, me ganó el entusiasmo”, se excusó el hombre.
Además, Nara se refirió a su (poca) relación con su flamante yerno. “No tengo un trato fluido con Mauro. Tiene razón en enojarse porque dije una cosa que no estaba confirmada, es su primer hijo y seguramente quiere decirlo él así que pido disculpas. No hablé con él, la última vez que lo vi fue en la fiesta de casamiento”, concluyó. Y bueno, una metida de pata la tiene cualquiera.