Aunque parezca increíble, muchos argentinos "conocieron" a Javier Mascherano (30) durante el emotivo Mundial de Brasil. El León, El Jefe o simplemente Masche fue la figura de la Selección Argentina subcampeona de la Copa del Mundo y se convirtió en el ídolo de chicos y grandes.
Desde la humildad, con una garra inigualable, un temple envidiable y una capacidad ténica natural y también muy entrenada, el número 14 del equipo de Alejandro Sabella demostró que es un grande tanto adentro como afuera de la cancha.
Con el correr de los partidos del Mundial, la figura de Mascherano se fue agigantando y, por ejemplo, miles de usuarios de Twitter crearon el hashtag #Maschefacts, con el que comenzaron a inventar proezas que el mediocampista sería capaz de hacer con los "superpoderes" con los que ayudó a la Selección a pasar a la final. Algunos ejemplos: "Si mandamos a Mascherano a negociar los fondos buitres, te trae el vuelto #Maschefacts", "Icardi, si tenés huevos robale la novia a Mascherano #MascheFacts", "El Kun tomó la mamadera hasta los 6 años. A esa edad Masche ordeñaba la vaca y hacía dulce de leche par todo el grado #MascheFacts".
Mascherano no sólo fue protagonista en la cancha y en las redes sociales (es un reconocido tuitero, con más de 3 millones de seguidores en @Mascherano), sino que se convirtió en tema habitual de conversación en bares, colegios, oficinas e incluso entre quienes no gustan del fútbol. Pero si hay alguien que lo conoce bien es María Fernanda Morello (29), su mujer y madre de sus hijas Alma (5) y Lola (7). La bellísima morocha de curvas infartantes (ver fotos) que acompaña hace 15 años al futbolista, contó algo más sobre su pareja en el diario La Capital de Rosario: "Javier es un tipo simple. Todos en esta familia lo somos. No es un prócer, sólo vive fútbol".
Fernanda, también oriunda de San Lorenzo, provincia de Santa Fe al igual que su marido, agregó: "Él se entrena mucho y a conciencia. Es muy exigente consigo mismo. Aunque no es así con los demás: con sus hijas y conmigo no es así".
Masche, además de marido amoroso y padre presente, es un jugador récord, ya que disputó más de 100 partidos en la Selección, obtuvo dos medallas de oro Olímpicas con el equipo nacional, participó de tres Mundiales (Alemania 2006, Sudáfrica 2010 y Brasil 2014). En el Barcelona, el club en el que juega desde 2010 junto a Lionel Messi, también brilla y ya lleva obtenidos 14 títulos.
Más allá de sus logros profesionales, lo más destacable del nuevo superhéroe nacional es su personalidad. Javier Mascherano es solidario, buen compañero, amiguero y más. Como si esto fuera poco, es Embajador de la Buena Voluntad de UNICEF y va por todas partes del mundo ayudando a los niños y transmitiendo valores. Lo que se dice, un ídolo con todas las letras.