“Jamás creí en el touch and go. Nunca la pasé bien saliendo con uno y después con otro".
“Caprichosa, impulsiva, sensible, romántica”, se define Floppy Tesouro (29) como pareja, quien cuenta su historia de amor como aquellas que sólo pasan en la novela. Tan lejos no está.
A su novia Ramiro Chillemi (29) se lo reencontró después cuatro años y medio sin verse y un largo “rollo” detrás: había sido su primer beso, su primer hombre a los 16 y estuvieron juntos hasta los 21. Un paseo en un shopping la cruzó con su ex suegro (ahora actual), y así obtuvo el primer paso para el nuevo comienzo: un número de teléfono, un mensajito, un llamado y una salida. De ahí a la convivencia hubo poco y nada.
"La separación de Matías Alé afectó mi carrera porque yo soy alegre y cuando corté la gente me vio triste. Fue la primera persona que me lastimó".
“Me invitó a tomar algo. Llegué y no sabía que iba a pasar pero al rato supe que quería eso para mi vida. Nos vimos y fue como el primer día. Sin histerias. Quisimos vernos al día siguiente y al próximo y no nos separamos más. Justo se estaba por mudar solo ¡pero no lo dejé!”, comentó la actriz y modelo en una entrevista con la revista Gente. “La convivencia fluyó. Ramiro sabe que soy avasallante. A mi me encanta estar de novia, no me gusta estar sola”, aportó.
Sobre la soledad, la libertad y las mujeres, Tesouro desarrolló su teoría. “Jamás creí en el touch and go. Nunca la pasé bien saliendo con uno y después con otro. Creo que las chicas que viven así lo disfrutan porque no le tienen que dar explicaciones a nadie pero a la mañana se sienten vacías. Lo respeto pero para mí no es sano”, argumentó.
"Con Ramiro nos dan ganas de ser padres, si fuera por mi hubiera sido mamá mucho antes. Ojalá el año que viene se den las dos cosas".
Cuando habló de la ruptura con Matías Alé su discurso se puso más filoso: “Fue un final que afectó mi carrera porque yo soy alegre y cuando corté con Matías la gente me vio triste. Más allá de lo personal, porque yo había apostado, la separación me afectó en lo personal. Fue la primera persona que me lastimó. Por suerte me di cuenta a tiempo y hoy estoy feliz con Ramiro”.
El bienestar parece ir en buena escala, porque a la convivencia le siguen los planes de casamiento e hijos. “Nos dan ganas de ser padres, si fuera por mi hubiera sido mamá mucho antes. Ojalá el año que viene se den las dos cosas. Casarme seria sólo el broche de oro para este amor”, reveló. Se viene la familia.