Carolina Aguirre: "La moda de comparar a Lavezzi con Donofrio me da ganas de escribir comerciales de balanceado. Le sacan las ganas de vivir a los guionistas”.
La famosa “Pochomanía” ha generado un nuevo debate en torno a las significaciones sociales (las interpretaciones, opiniones, expresiones de unos y otros sobre el tema), que ahora llegó a las orillas del debate televisivo o de medios.
¿El motivo? Tanto en mensajes de usuarias de Twitter como en análisis de periodistas sobre el fenómeno Ezequiel Lavezzi se comparó al futbolista con Donofrio, el querido personaje de Guapas, y disparó una nueva polémica sobre las apropiaciones y significaciones culturales.
“La moda de comparar a Lavezzi con Donofrio me da ganas de escribir comerciales de balanceado. Le sacan las ganas de vivir a los guionistas”, advirtió el 8 de julio en Twitter Carolina Aguirre, guionista de la ficción de El Trece. “Mi iría a vivir a Plutón pero no está suficientemente lejos. Necesito otra galaxia. Algo más lejos”, añadió luego.
Una usuaria contestó: "No entiendo. ¿Es porque son grones hot?". "Nadie entiende porque es la idea más ridícula que se escuchó desde que el mundo es mundo", argumentó la guionista.
Valeria Schapira: "¿Qué tienen en común el Pocho y Donofrio? Son dos pibes de origen humilde...".
En una nota de la periodista Marina Zucchi, publicada el 7 de julio en Clarín.com, se describía que “así como el cuerpo del Pocho Lavezzi se convirtió en mercancía femenina digital durante el Mundial, el alma de un tal Donofrio es el juguete con el que fantasean miles de argentinas”. Y agregaba: “Puede que “los Donofrios” no existan, que sea un antihéroe de cuento de hadas, pero es el que le gana a los bíceps mal tatuados de Lavezzi”.
Valeria Schapira hacía algo similar en La Capital el 6 del mismo mes. “¿Qué tienen en común el Pocho y Donofrio? Son dos pibes de origen humilde que están cambiando la forma que muchas mujeres tienen de elegir a los hombres deseables”, escribía.
El revuelo virtual despierta preguntas. ¿Es viable comparar las apropiaciones que genera un personaje en la audiencia con un fenómeno espontáneo (de lo real), en el contexto de un Mundial? ¿Cómo se deben analizar las significaciones sociales en torno a las cuestiones de género, el deseo colectivo y la televisión? ¿Qué hacen las audiencias con lo que ven y cómo responden a eso los guionistas? ¿Hay significaciones sobre Donofrio o Lavezzi "correctas" o "incorrectas"? ¿Tiene algo que ver el fenómeno "Pocho" (que invirtió el rol piropeador del hombre) con lo que sucede con Donofrio? O, como plantea Aguirre, entre el personaje y el futbolista no hay punto de contacto.
Algo sí se sabe y es irrefutable. Hay tantas interpretaciones viables como Pochos, Donofrios y mujeres en el mundo. Lo ideal, siempre, es el debate.
Ciudad.com se comunicó con Aguirre para ampliar su visión del tema, pero se negó a opinar.